El próximo lanzamiento de la Switch tiene a Nintendo insistiendo en que es una consola "para el hogar que te puedes llevar fuera", como ha vuelto a recordar Reggie Fils-Aime. El problema de tener ese acercamiento con respecto a la consola es que habrá que compararla con las otras consolas de salón, como la PlayStation 4 y Xbox One, bastante más potentes que esta Switch.
Si bien los que han podido jugar a la Switch han visto que como portátil funciona fluida a 720p y 30 o 60 FPS según el título, conectada a un televisor 1080p funciona bien, pero no a esa resolución y no a una generación de fotogramas constantes. The Legend of Zelda: Breath of the Wild funciona a 900p y 30 FPS en el televisor, pero no son constantes. Hay ciertas situaciones en la que experimenta bajones, como al realizar efectos de profundidad de campo al finalizar ciertas luchas.
El juego sigue en desarrollo, por lo que Nintendo puede pulirlo todavía para que mantenga los 30 FPS constantes en cualquier situación. Pero si Nintendo quiere que se considere la consola como una de salón, como parece ser el caso, lo va a pasar bastante mal.
Vía: VG24/7.