La franquicia de Destiny va a llegar al PC con Destiny 2 y, mientras Bungie ya está asentando las bases de una tercera entrega, los jugadores de consola se darán cuenta de las enormes diferencias gráficas que va a haber entre la versión de Windows y las de consola. Porque el juego funcionará a 30 FPS en estas últimas, incluso en la PlayStation 4 Pro, aunque lo moverá a 4K UHD.
Esta consola siempre la he visto más como la forma de manter los 60 FPS en los juegos a 1080p —los televisores y monitores más comunes en un hogar— que para jugar a 4K —que no puede con la mayoría de juegos medianamente exigentes—. Bungie ha optado por hacer funcionar el juego a 4K y 30 FPS en la PS4 Pro en lugar de reducir su resolución para ganar más fluidez debido a que podría querer que funcionen al mismo refresco en todas —podría haber cierta ventaja para los jugadores de PS4 Pro si lo jugaran a 60 FPS—, por lo que podría no haber un modo de 1080p y 60 FPS.
Desde Bungie han indicado que es también un problema de la CPU y no de la GPU, ya que el motor de físicas del juego es muy exigente y, unido a una mejora sustancial de la IA, la consola tampoco tiene suficiente potencia de procesamiento para funcionar a 60 FPS, aunque le sobra en el apartado gráfico. Puesto que la versión de Windows se retrasará con respecto a la de consolas, faltará cierto tiempo hasta que lleguen los vídeos de comparación a 4K entre PC y PS4 Pro.