Ubisoft, la creadora de éxitos como Assassin’s Creed y Far Cry, podría cambiar de manos en los próximos meses. La familia Guillemot, fundadora y principal accionista de la empresa, estaría negociando una posible venta de la empresa pero con el objetivo de mantener el control de la compañía durante el proceso. Por otro lado, Tencent, el gigante chino que ya posee un 10 % de las acciones de Ubisoft, estaría considerando aumentar su participación, a la vez que quiere evitar que otras compañías puedan echarle el lazo, y tampoco quiere una opa hostil.
Ubisoft lleva meses con retrasos en lanzamientos importantes, cierres de estudios, despidos y cancelaciones de juegos. Además, las acciones de la compañía han sufrido caídas significativas, lo que ha llevado a algunos accionistas minoritarios a presionar para privatizar la empresa. En octubre, el fondo activista AJ Investments ya había señalado la necesidad de un cambio en la gobernanza, reflejando el malestar de los inversores ante la situación actual.
Lo más llamativo es el papel de Tencent. Con una participación significativa en Guillemot Brothers Limited, la matriz de la familia fundadora, podría consolidar su influencia si decide involucrarse directamente en la compra. Este movimiento sería estratégico no solo para Ubisoft, sino también para el propio Tencent, que busca expandir su presencia global. Por ahora, las negociaciones seguirían en marcha y no se habría llegado a ningún acuerdo definitivo.
Mientras tanto, los rumores han causado revuelo en los mercados. Las acciones de Ubisoft subieron más del 30 % tras conocerse las noticias, aunque todavía están lejos de los niveles de hace unos años. Este posible cambio de manos genera tanto expectación como incertidumbre, y los analistas están atentos a cómo estas negociaciones podrían afectar a sus sagas favoritas y futuros proyectos.