Actualmente son tres los principales sistemas operativos más usados: Linux, OS X y Windows. Y no por ese orden. ¿Podríamos decir que alguno de ellos es mejor que los demás? Desde un punto de vista técnico quizás sí, pero, ¿y desde el punto de vista del usuario?
Y es que el usuario final es el que debe decidir si un sistema operativo (SSOO) es bueno para él o no. Quizás un usuario de OS X decida que es el mejor del mundo, mientras que un linuxero dirá que esta o la otra distribución es la mejor. Alguien de Windows podrá decir que los juegos corren muy bien sobre el equipo, y que como usa este sistema operativo (sí, actualmente ya se puede valorar como tal) en todas partes, no entiende cómo la gente puede usar cualquier otro ya que son más complicados de utilizar. Eso lo diría si no necesita la línea de comandos, obviamente.
El punto psicológico es siempre fundamental para intentar entender las necesidades de un usuario de sistema operativo. Microsoft, desde los primeros compases de Windows, invirtió muchos cientos de millones de dólares en estudiar la usabilidad de Windows. Algo que nos parece tan natural como el doble click para ejecutar un programa o arrastrar iconos por la pantalla, hace 20 años no lo era tanto. Os recomiendo que veais los vídeos de usabilidad de Microsoft de 1993.
Si el usuario obtiene del SSOO lo que necesita, seguramente opine que es un buen sistema operativo. La gente que suele tener conocimientos del campo podría llegar a discrepar de que alguien valorara positivamente Windows 95, pero por aquel entonces era lo mejor. Incluso teniendo que reinstalarlo unas tres veces por semana. Pero fue el inicio de la revolución de las ventanas (aunque no fuera un invento de Bill Gates).
Podríamos catalogar los SSOO según su funcionalidad, pero es más un tema de dinero que otra cosa el que evolucionen en una dirección o en otra. Por ejemplo, OS X siempre ha estado orientado al usuario (muchas veces forzados por la competencia, como en temas de accesibilidad). Hacer cómodas tareas diarias, generar scripts o usar programas de productividad. En frente, uno de sus competidores era Linux, un SSOO dejado prácticamente para la enseñanza y los grandes servidores de Internet.
Pero ahí apareció Ubuntu, creando versiones orientadas al usuario final (con cierta inyección de dinero), y Linux ha empezado a ser considerado también como un SSOO de consumo y no sólo para empresas. Simplemente porque muchos usuarios sólo quieren ver películas, navegar por Internet y manejar un poco el Word (OpenOffice es más que suficiente). Y como es gratuito, es doblemente bueno.
Por ello, las discusiones de "este SSOO es mejor que el tuyo" son prácticamente inútiles. Si el que tú usas hace lo que quieres, no necesitas otro. Si el SSOO de con quien discutes hace lo que quieres, genial. Y es que seguro que a alguien que trabaje diseñando webs prefiera usar un Linux para poder montar un entorno local Apache (o el servidor que sea) con base de datos lo más parecido al que use en producción. Y que alguien que solo se dedique a jugar no vea la necesidad de tocar la línea de comandos de Linux.
Yo prefiero OS X porque, simplemente, hace todo lo que necesito de serie (incluido Time Machine, indispensable) y tiene todos los programas que necesito. ¿Para qué más? Si nos pusiéramos a discutir sobre si Ubuntu es mejor que Windows u OS X, habría tal cantidad de factores a mirar en la discusión (precios, si necesito algo que me proporciona, si juego, no juego, hago diseño, programo, mantengo servidores, uso ofimática, mi estado de humor, si me gustan los que son más bonitos...), que no llegaríamos a ninguna parte.
Eso sí, parece universalmente aceptado que Windows Vista era una mierda de sistema operativo. ¿Estáis seguro de ello? Sí, tenía problemas al copiar y pegar archivos. Podría parecer que iba lento porque necesitaba más máquina para correrlo que la habitual de la época. Pero a mi, para esos años, era el mejor porque me iban los juegos muchísimo mejor con mi hardware que bajo Windows XP. Y es que, al fin y al cabo, decidir si un sistema operativo es bueno o malo es una decisión subjetiva del usuario final.
¿Y tú cuál utilizas?