Otra noticia relacionada con Google en el último día (y van...) pero esta no tan buena como las demás para algunos usuarios. Google va a cerrar definitivamente varios de sus servicios a partir del 1 de julio, y eso incluye Google Reader, tras ocho años de existencia. Esto va a levantar bastantes ampoyas en una buena cantidad de sus usuarios que, aunque algunos aseguran que es la gota que colma el vaso con respecto a Google y su política de hacer lo que quiera, sin duda seguirán usando sus servicios (como Gmail).
Pero el gran objetivo de esta operación no es otro que FeedBurner, el último recurso de RSS al que le seguiría dando apoyo la compañía. ¿El motivo real de todo esto? Que los feeds de RSS no reportan ingresos por publicidad a la compañía, empeñada como está hasta de eliminar las aplicaciones de Google Play todas aquellas aplicaciones que sirvan para bloquear anuncios en Android. A los usuarios no les queda más remedio que rootear sus terminales si quieren instalar estas aplicaciones. Había la posibilidad de añadir anuncios a los feeds mediante AdSense, pero ante el bajo uso del mismo, también decidió retirarlo el octubre pasado.
Con la decisión de cerrar Google Reader, y próximamente (estoy más que seguro) de hacer lo mismo con FeedBurner, Google está tomando la decisión de poner los beneficios de su compañía (ya de por sí amplios) por encima del usuario final. ¿Pero realmente nos extraña? Pues a los que sabemos perfectamente que Google es una compañía más, y no la amiga de los niños que reparte piruletas en la puerta de los colegios, en absoluto. Pero muchas veces los más acérrimos de Google se olvidan de este detalle ya que "dan cosas gratis". Y lo gratis mola más... hasta que te lo quitan.
A parte de los ingresos directos por publicidad que no recibe por mantener activo Google Reader, está que no recibe tampoco información de los gustos y páginas que visita el usuario. Los anuncios que veis de Google en cualquier página, además de proporcionarnos dinero a los blogs, le da a Google una información vital para intentar optimizar el anuncio a mostrar al usuario para conseguir un mayor porcentaje de clicks. Esa información la necesita ahora más que nunca por el Social Graph de Facebook, que le va a poner las cosas muy difíciles en este sector, ya que Facebook dispondrá de información más concreta sobre los usuarios, y eso se traduce en un coste por click mayor (en un futuro) que los de Google. Y eso no gusta a la gran G.
El resto de aplicaciones que va a cerrar las puertas en los próximos meses son algunas que dan soporte a productos de la competencia. Los afectados son GUI Builder y otros widgets para AppsScript, la API de CalDav (el gran afectado es Microsoft), Google Building Maker, Google Cloud Connect, Google Voice App para BlackBerry, Search API para Shopping y Snapseed Desktop. En la mayoría de casos, poco nos va a afectar.