Por ahora el Moto X, el único gran lanzamiento del año que ha hecho Motorola, está a la venta exclusivamente en EE.UU y Canadá. El motivo es el nivel de personalización del terminal, ya que la compañía asegura su entrega en 4 días desde su fábrica de Texas. Aunque Motorola ha confirmado que el precio de venta libre del teléfono es de 579 dólares, ¿cuál es su coste de fabricación?
Esa siempre es una pregunta a la que distintos analistas intentan dar respuesta. En el caso del Moto X, IHS iSuppli ha dado una cifra: 221 dólares. Un precio que parece muy elevado para los componentes internos que tiene (pantalla de 4.7 pulgadas a 1280x720 píxels y procesador de doble núcleo), pero en el que hay que tener en cuenta que no cobra lo mismo un obrero de Texas que uno de China, y además cuenta con un SoC y otros chips hechos a medida para el terminal que le permiten estar continuamente escuchando lo que se dice a su alrededor (algo que seguro que a la NSA y a PRISM les encantará).
Por eso consideran que el coste del hardware es de 209 dólares y el proceso de fabricación 12 dólares, que asombra debido a que no cuesta mucho más que fabricarlo en China. Este punto va a dar mucho de lo que hablar próximamente, ya que el aumento del precio del petróleo está elevando cada vez más el precio de transportar los gadgets desde las fábricas de Asia hasta el resto del mundo occidental, algo que Apple y Motorola ya están teniendo en cuenta para desplazar la producción de vuelta a EE.UU.
La pantalla de 4.7 pulgadas a 720p cuesta 66 dólares, la memoria flash (RAM y almacenamiento interno) 21 dólares, y el SoC MSM8960T (procesador, gráfica y chips de telefonía y comunicaciones) 30 dólares. Este alto precio de construcción la verdad es que me da que pensar sobre el precio del Nexus 4, ya que de precio de venta libre es de 249 dólares (versión 16GB) y no se diferencia tanto en sus componentes internos.
Motorola no venderá en Europa el Moto X, sino otro smartphone que está todavía por anunciar.
