Para entender el mundo de las consolas con el ejemplo de hoy creo que se servirá perfectamente. No es ningún secreto que se venden prácticamente a precio de coste (algo que ya dijo en su momento Nintendo de la Wii U) y que la principal fuente de ingresos es la venta de juegos y periféricos. Es exactamente lo que va a ocurrir con la PlayStation 4.
Tras desmontar completamente una PS4, mando incluido, y analizar el coste de sus componentes, IHS iSuppli ha calculado el precio de fabricación más los de ensamblado en 381 dólares. Tan sólo 18 dólares por debajo de su precio de venta al público.
El coste del procesador fabricado por AMD y basado en su arquitectura Jaguar de 28nm cuesta cerca de 100 dólares. El precio de la RAM que incluye (8GB de DDR5) es de 88 dólares, y el del disco duro de Seagate de 500GB es de 37 dólares. Los componentes para conectividad (WiFi), unidad de lectura óptica y el mando suman otros 46 dólares. El resto de componentes (carcasa de plástico, ventiladores, placa, etc.) y el coste de montaje suman otros 110 dólares.
En el caso de la PlayStation 4, tiene la ventaja de que es extremadamente fácil de abrir y de cambiar sus componentes internos. De hecho, en iFixit le dan una nota de 8 sobre 10 en su ranking de poder reparar los gadgets por uno mismo.
Pero aunque cueste 381 dólares fabricarla, hay que tener en cuenta los precios que se quedan distribuidoras y tiendas finales de los 399 dólares de precio de venta al público de la consola. Eso deja, siendo optimistas, que Sony ingresa unos 240 dólares por consola. Así que en la realidad, Sony va a vender a pérdidas la consola, al menos durante las primeras millones de unidades. Pero es lo normal en la industria del videojuego cuando se presentan consolas de nueva generación.
Vía: AllThingsD.