Samsung ha presentado sus resultados fiscales para el último trimestre de 2014 y finalmente no ha cumplido con las expectativas de crecimiento que los inversores y analistas tenían puestas en la empresa. Es la primera vez en dos años que reduce beneficios, situándose en los 7.700 millones de dólares frente a los 9.300 millones del tercer trimestre. En total, Samsung ingresó unos 55.130 millones de dólares.
Teniendo en cuenta que se trata del trimestre navideño, es un poco preocupante ya que muestra que durante la última mitad de 2013 la compañía se ha estancado en ventas y su senda alzista en beneficios. Una de las acciones que llevarán de forma inmediata es reducir gastos en publicidad para el sector de los dispositivos móviles, aunque aseguran que no ha sido ese sector el que ha provocado la disminución de beneficios.
Las causas reales, según la compañía, es el impacto negativo que la cotización a la baja del cambio wons-dólares está provocando a la hora de repatriar el dinero de las ventas de productos, lo que totalizarían al menos uno 650 millones de dólares menos de beneficios. También un exceso de stock de componentes como los de pantallas de TV a los que no se ha dado salida.
Tampoco es que se deban llevar las manos a la cabeza ya que siguen siendo la compañía que más ingresos genera del mundo, sólo comparable con las ventas de Apple, además de ser pronto para decir si esto va a seguir un patrón bajista o es algo puntual como asegura Samsung. Pero lo cierto es que gastarse 14.000 millones de dólares al año en publicidad, mucho más de lo que hace Apple, para crear anuncios ridículos en el terreno de los smartphones, puede ser un buen punto de partida para volver a tomar en serio a la compañía.
