El ritmo de adopción de iOS 8 está siendo más lento que el de iOS 7. Al fin y al cabo no aporta ningún cambio realmente importante ni vistoso como el rediseño de iOS 7, y la máxima informática de "si funciona, no lo toques" se está aplicando a los iPhones e iPads más antiguos, como el iPhone 4s o el iPad 2.
Algo menos de dos meses después del lanzamiento oficial de iOS 8, esta versión está instalada en el 56% de los dispositivos que acceden a la App Store. No ha mejorado mucho desde el último dato del 52% de hace un par de semanas. Será interesante ver cómo mejora su cuota de mercado estas navidades, ya que parte será debida al aumento de ventas de nuevos iPhones más que por usuarios actualizando sus dispositivos. También el uso de nuevas APIs en aplicaciones de los desarrolladores forzará a muchos usuarios a actualizar para poder utilizarlas, por lo que serán todavía más los usuarios que tendrán que actualizarse.
Vía: Apple Insider.