Samsung ha intentado ya en varias ocasiones hacerse un hueco en el mundo de los relojes inteligentes. Seguramente lo haya conseguido, pero es un mercado tan pequeño a día de hoy que es difícil decir si ha tenido un impacto real en el sector. Pero al menos ha tomado nota de lo que piden los usuarios de relojes: que sean bonitos.
En el evento Galaxy Unpacked de presentación del Galaxy Note 5 mostró al final lo que será el Samsung Gear S2. Por lo visto en la presentación es un reloj que promete un diseño muy atractivo (estoy gratamente impresionado, al menos hasta que lo pruebe), y que lo mostrará con detenimiento en el IFA de Berlín de principios de septiembre.
Doy por sentado que no utilizará Android Wear, para desilusión de muchos. El sistema de nomenclatura de Samsung dice que los productos con Android incluyen la palabra Galaxy, y así ha sido desde el principio de los tiempos. Además que la interfaz mostrada por Samsung no tiene nada que ver con Android Wear.
En el terreno de las características, incluiría Tizen y un procesador de bajo consumo y centrado en la autonomía, según los rumores que se han ido apareciendo en los últimos meses. Este reloj posiblemente sea el denominado Orbis, y por tanto el bisel del reloj se podría mover como si fuera una rueda para interactuar con lo mostrado en su pequeña pantalla. Por ejemplo, para ampliar un mapa sin tapar la pantalla, como se hace en el Apple Watch con la corona digital.
A continuación tenéis imágenes promocionales para el mundo de la moda de las nuevas phablets de Samsung. No es que me peguen demasiado en el mundo de la moda (salvo el reloj, que tiene muy buena pinta), pero Samsung insiste en vender sus productos de una forma para la que no están pensados (en este caso para la pasarela).
Vía: GSM Arena.