La presentación de los nuevos iPhone está a la vuelta de la esquina, tanto como este miércoles, y los analistas no están perdiendo en tiempo en dar más detalles de lo que tendrán. En el caso del analista Ming-Chi Kuo de KGI Securities prefiere empezar a valorar lo que traerá el iPhone 7 (o como se termine llamando) que se presente el próximo año.
Vaya por delante que Kuo mantiene un buen registro de aciertos en sus análisis de las líneas de producción de Apple y próximos productos. Según él, el iPhone 7 tendría un grosor entre 6.0 y 6.5 mm, que sería una reducción importante con respecto a los 6,9 mm del iPhone 6. No espera que haya cambios en la tecnología Force Touch a incluir en los iPhones de este año debido al coste de desarrollo y adaptación de las cadenas de producción que han hecho Apple y sus socios en sus fábricas.
No cree que Apple vaya a incluir a corto plazo baterías de combustible en el iPhone como se ha hablado anteriormente, y que tampoco adoptará resoluciones absurdas 4K para la pantalla. Una tecnología in-cell avanzada, que permite tener en una misma capa los sensores táctiles, digitalizador y la pantalla LCD, permitiría a Apple llegar a los 6 a 6.5 mm de grosor. Pero si no viene acompañada de mejoras en el consumo de iOS o de baterías más pequeñas de mayor capacidad, no le auguro un buen futuro con ese grosor.
Vía: MacRumors.