Apple es una de las compañías que más extendidas están por el mundo, y eso le ha llevado a crear un entramado de empresas y cuentas bancarias para mantener el dinero lejos de su país de origen, EE. UU. Lo que evita que las grandes compañías estadounidenses lleven el dinero de vuelta al país es que les tocaría pagar un fuerte porcentaje a modo de impuestos.
Según un estudio del grupo Ciudadanos por la Justicia en los Impuestos (Citizens for Tax Justice), las corporaciones multinacionales estadounidenses utilizan paraísos fiscales para evadir el pago de 90.000 millones de dólares cada año. La que más evita pagar es Apple, que le debería a EE. UU. hasta 59.200 M$ en impuestos no pagados.
Pero nadie puede obligar a las empresas a repatriar el dinero, y Tim Cook ya indicó a una comisión de investigación que a ellos no les importaria llevar el dinero a EE. UU. si no tuvieran que pagar un 35% de impuestos para hacerlo. Hay que tener en cuenta que de ese dinero ya se han pagado los impuestos legalmente debidos en los países de origen (o en Europa a través de Irlanda o Luxemburgo, con impuestos de sociedades especialmente bajos).
En el caso de Google, tenía 25 subsidiarias en paraísos fiscales en 2009, pero desde 2010 sólo informa de tener dos en Irlanda. La compañía ha aumentado de 7.700 M$ a 47.400 M$ el dinero que tiene en ellas. Microsoft tiene 10 subsidiarias en paraísos fiscales, con un volumen de 108.300 M$.
Pero en parte los ingresos de las empresas en paraísos fiscales proceden del cobro a otras empresas pertenecientes a sus compañías matrices por el uso de tecnología y servicios, como patentes del buscador de Google, lo que les permite evitar pagar ciertos impuestos en sus países de origen. EE. UU. en este caso, pero también son prácticas habituales en Europa a la hora de contratar publicidad en AdSense que se hace desde Irlanda aunque el anunciante sea de Inglaterra, Francia o España.