Los países tienen que ir asentando las bases legales para el advenimiento de los coches autónomos, y eso implica que muchas veces van a legislar en contra de los deseos de los fabricantes de estos vehículos. Es el caso de la legislación propuesta en Alemania, ya que implicaría sobre todo una medida que no gusta a Google.
Se trata de la inclusión de un volante en todo vehículos autónomos, además de un conductor que, pese a no tener que prestar atención en la carretera, debe estar preparado para tomar el control ante cualquier eventualidad. Google quería fabricar sus coches autónomos sin volante y sin necesidad de tener un piloto, aunque la legislación propuesta en California es similar a la alemana en este sentido.
Además, los alemanes quieren que los vehículos autónomos incluyan una caja negra para poder averiguar qué fue mal en caso de accidente. Es un sistema que algunos fabricantes ya tienen incluidos en sus coches, como Tesla Motors, por lo que no va a haber demasiados problemas para que las tecnológicas lo implementen.
Vía: The Verge.