Cada vez más expertos están de acuerdo en que la programación debería enseñarse en los colegios junto con el resto de materias como Matemáticas o Historia. La programación no solo suma un conocimiento cada vez más útil en nuestra sociedad, si no que ayuda al entendimiento de conceptos abstractos y a tener un pensamiento más estructurado. Pero poner a un niño a programar no es algo tan sencillo, así que hay que buscar las formas para que le encuentren el gusto a la programación.

Una de estas iniciativas viene por parte del fabricante de robots Ozobot, que ya presentara hace tiempo uno con el mismo nombre y propósito. Ahora da a conocer el nuevo robot que toma su relevo, Evo, que añade unas cuantas funcionalidades.

Con la adolescencia los jóvenes tienden a perder el interés en los juegos tecnológicos, pero Evo ha ganado en componente social, algo que despierta mucho el interés a estas edades y sobre todo en las niñas, mucho menos presentes en temas de tecnología. A través de una aplicación para teléfonos se puede controlar a Evo y crear sencillos programas con gran componente social, que llevarán a los robots a interactuar entre ellos imitando sus movimientos o realizando bailes gracias a los sensores que incorporan.

Los programas se podrán crear mediante Blocky, un sencillo lenguaje por bloques creado por Google, usando C++ o Javascript, por lo que sus usuarios podrán adaptar su forma de codificar a sus conocimientos. Evo se pondrá a la venta en su página oficial a partir del 1 de noviembre a partir de 99 $.

Vídeo

Vía: Wired.