PewDiePie es el youtubero más importante con un canal de más de 53 millones de seguidores, pero lo que aquí en Europa podría pasar como una broma sin importancia, en EE. UU. no ha sentado nada bien. Un vídeo suyo mostraba a dos indios que contrató a través de Fiverr para portar una pancarta que ponía "Muerte a todos los judíos", y otros dos vídeos en los que aparecía parafernalia nazi y bromas antisemitas.
Los tres vídeos han sido retirados de YouTube, pero Felix Kjellberg —el nombre real de PewDiePie— se ha cerrado con ellos su salto a Hollywood, donde el dinero lo mueven los productores judíos. Otros medios afirman que serían hasta nueve los vídeos en los que Kjellberg habría hecho bromas antisemitas desde el pasado agosto. Además, con un Bob Iger como director ejecutivo de Disney y judío, le han dado la patada de Maker Studios, adquirida por Disney en 2014 y que iba a producir una serie con Kjellberg. La práctica de PewDiePie de reírse de todo y de todos en su canal de YouTube le va a costar unos cuantos millones de dólares de dinero que ya no ingresará.
Además, con la polvareda que se ha levantado, ahora es YouTube la que le ha vetado una serie que iba a tener en YouTube Red, el servicio de pago. También ha perdido su estatus de Preferido de Google, lo que le daba acceso a más patrocinadores y de mayor relevancia —y que pagaban más—. Las bromas antisemitas, aunque asegura que no las hizo con mala intención sino para comprobar lo que podía hacer la gente por 5 dólares en Fiverr, le van a salir muy, muy caras.
Indirectamente, ahora Kjellberg es un héroe para los movimientos neonazis.
Vía: Tech Crunch, EnGadget.