Perdonad el tono de sorna y guasa del titular, pero es que Sony se lo merece. La compañía presentó este mes el Xperia XZ1, un auténtico teléfono de gama alta, al que le falla, y mucho, un detalle. El diseño de la carcasa. En pleno 2017, con hasta Apple poniendo en el mercado un teléfono casi sin marcos, el Xperia XZ1 no puede atraer a ningún comprador. Al menos, no si se le pone al lado en las tiendas un Galaxy Note 8, Galaxy S8, el iPhone X o el Mi Mix 2.
El director para la India de la compañía, Kenichiro Hibi, ha dicho que la compañía está «planeando lanzar una nueva generación de productos, de los que se puede esperar un diseño completamente nuevo». Aplausos y vítores para Sony, que va a entrar en 2017. O en 2016, si se tiene en cuenta que el Mi Mix de Xiaomi salió el año pasado, y tenía unos reducidos marcos de pantalla.
No voy a negar que el Xperia XZ1 tiene un gran hardware, con un Snapdragon 835 por bandera y una pantalla con HDR como insignia, pero el diseño... Ese diseño al que se te va la vista nada más verlo y piensas «me he equivocado de Xperia; o de año». La compañía empezó a utilizar el actual diseño en 2013, y desde entonces ha habido pocos cambios. Los picos del Xperia XZ1 lo hacen incómodo de sujetar en ciertas ocasiones, y es mucho más aparatoso de lo que debería ser un teléfono de 2017. Luego se preguntarán que por qué no venden más móviles.
Vía: The Verge.
