Comprar un PC en 2017 ha tenido un sobrecoste importante con respecto a 2016 en forma del extra que hay que pagar por la RAM, que está a casi el doble de lo que estaba el año pasado. Pero también los SSD, casi imprescindible tener al menos uno de 120 GB para el sistema operativo, han subido de precio más de un 50 %, y parece que los precios se mantendrán a este nivel durante 2018.
Desde DRAMeXchange aseguran que los principales fabricantes de memoria (Samsung, SK Hynix y Micron) han optado por «desacelerar el ritmo de expansión de su capacidad de fabricación y las migraciones a nuevas tecnologías para sus chips de memoria para mantener los precios tan altos como lo están durante esta segunda mitad de 2017, y mantener los abultados márgenes de beneficios».
En el mismo artículo se indica que la producción en 2018 de estos fabricantes aumentará un 19.6 %, aunque se prevé que la demanda lo haga un 20.6 %. Las nuevas fábricas planeadas por estas compañías no estarían en funcionamiento hasta como mínimo 2019. Mientras tanto, Samsung solo puede expandir las líneas 15 y 17, y planea crear una segunda fábrica para obleas de 33 cm en Pyeongtaek, donde abrió recientemente una planta para producir memoria V-NAND.
SK Hynix tampoco tiene espacio para aumentar la producción de obleas, y tendrá una nueva fábrica en 2019 de obleas de 33 cm en Wuxi (China). Por último, Micron es la única que tiene posibilidad de expandir en 2018 su producción al tener todavía entre el 60 y el 70 % del espacio de la fábrica A2 sin ocupar, lo que podría proporcionar una producción de 30 a 40 000 obleas al mes.
Vía: TechPowerUp.