Si 2017 fue un año en el que AMD resurgió de sus cenizas, 2018 va a ser un año no menos potente en cuanto a lo que tiene preparado. Lo primero que llega este año de AMD, el 9 de enero, son las APU de movilidad Ryzen 3, para portátiles y mini-PC. Las nuevas APU son dos: Ryzen 3 2300U y Ryzen 3 2200U. El primero es un procesador de cuatro núcleos sin multihilo, con frecuencia base de 2 GHz y turbo de 3.4 GHz, con núcleos Zen y fabricado a 14 nm. La gráfica integrada es una Vega 6 con 384 sombreadores.
El segundo es un procesador de dos núcleos con multihilo, con frecuencia base de 2.5 GHz y turbo de 3.4 GHz, misma arquitectura y una Vega 3 de 192 sombreadores. Van a ser unas APU bastante simplonas, pero al menos le darán mayor visibilidad a AMD en el sector de los portátiles. Ambos tienen un TDP de 15 W, y por si hay dudas, no incluyen HBM2, sino que como todas las APU funcionan a la velocidad de la memoria principal —en este caso, DDR4-2400—.
Varios fabricantes se unen a la compañía para promocionar las APU Ryzen de portátil, como Acer con la serie Nitro 5, que combinan un Ryzen 7 2700U o Ryzen 5 2500U con una RX 560. Pero también Dell con un nuevo Inspiron serie 5000 con mismas opciones de APU y una Radeon 530 —no es Polaris, sino un refrito de una generación anterior con 384 unidades de cómputo, y puede que hasta sea peor que la Vega 8 o 10 de 512 o 640 CU que tienen las APU ofertadas—. El primero con pantalla de 15.6 pulgadas y el segundo con una de 15.6 o 17 pulgadas, con varias opciones de memoria y almacenamiento.
Vía: AnandTech.