Aunque Apple sea el propietario de las tecnologías que utiliza en sus productos, no dispone casi de fábricas propias por lo que tiene que recurrir a terceros para producirlos. En el caso de las pantallas OLED, requiere de la pericia de Samsung en este sector para combinarla con su propia tecnología y crear las pantallas del iPhone X o el Watch. Sin embargo, tras la presentación de resultados del primer trimestre del año, Samsung ha hecho un comentario que pone en duda las ventas del iPhone X.
Las ventas de su división de paneles para empresas «se vio afectada por una menor demanda de paneles OLED flexibles», que son exactamente los que se usan en el iPhone X. Se ha venido rumoreando en los últimos meses que Apple había cancelado parte del pedido de estas pantallas a Samsung, y que Samsung estaba intentando colocarlas a otros fabricantes —algo que dudo que pueda hacer, teniendo en cuenta que incluyen tecnología de Apple—.
Todos los analistas están haciendo previsiones malas de ventas del iPhone X. Si bien Apple anunciará cuántos iPhone ha vendido en el T1, no desglosa nunca la información por modelo, por lo que podría verse paliadas unas malas ventas del iPhone X con unas mejores ventas del iPhone 8 y anteriores. Por eso ya se tiene puesta la mirada en los próximos iPhone a presentarse en septiembre, que tendrían un precio más bajo, y habría un iPhone X con pantalla tipo IPS.
Vía: 9to5Mac.