Microsoft ha empezado a distribuir la actualización semestral de Windows 10, llamada simplemente octubre 2018, y en ella parecía que no había grandes novedades. Un fallo técnico por mi parte, porque se me había olvidado que Microsoft tenía que activar un pequeño pero importante apartado de las DirectX 12 como es la versión pública de la biblioteca DirectX Raytracing (DXR).
Como he comentado anteriormente, para que Nvidia pueda usar adecuadamente el trazado de rayos en tiempo real en sus tarjetas gráficas GeForce RTX se precisaba de esta biblioteca. Hasta ahora no hay ningún contenido público que haga uso del trazado de rayos, y la otra característica usada en las RTX como es el supermuestreo por aprendizaje profundo (DLSS) se usa a través de los núcleos tensoriales de las unidades gráficas Turing, si bien también hay una biblioteca específica para ello, DirectML, para realizar inferencias de aprendizaje profundo.
Así que, a partir de ahora DXR sale de su formato experimental y se hace público para cualquier usuario de Windows 10 que instale la actualización de octubre 2018. Los primeros juegos en hacer uso de DXR a través de RTX de Nvidia serán Battlefield V, Metro Exodus y Shadow of the Tomb Raider. Pero como dije en el análisis de la GeForce RTX 2080, es muy difícil que Nvidia lo use para promover sus ventas cuando no hay juegos que lo usen ni habrá casi juegos que lo usen hasta dentro de al menos seis meses.
Quiero dejar claro de que cuando se habla de trazado de rayos en estos días se está refiriendo al trazado de rayos en tiempo real, si bien a una calidad muy inferior a la que se usa en los estudios de cine. Hasta ahora las escenas se tenían que renderizar para generar vídeos y ver si estaba todo correcto, y es un proceso que según la complejidad de la escena puede llevar horas en las películas de animación. Este trazado de rayos es una versión ligera de ese uso profesional, y en tiempo real, por lo que no hay que esperar para ver los resultados.
Cualquier tarjeta gráfica actual es capaz de usar DXR, si bien la falta de núcleos específicos para ello impacta enormemente su rendimiento. Por eso algunos dirán, como me han dicho, «pero es que AMD ya tiene trazado de rayos en tiempo real en sus tarjetas gráficas». Sí, pero con un rendimiento deplorable, como ocurre con las GeForce GTX. Así que para ser más específico aún, de lo que se habla ahora mismo es que el futuro de los videojuegos pasa por el trazado de rayos en tiempo real por hardware. Una empresa que le ha llevado diez años a Nvidia y que será interesante ver por dónde sale AMD, actualmente desaparecida en el sector de las tarjetas gráficas.