Los teléfonos de pantalla plegable van a ser una realidad en 2019, y mientras los mercados estadounidense y chino se preparan para la llegada de un primer modelo en diciembre, uno de los detalles que hay que tener en cuenta para ellos es la adaptación de la interfaz. Por ello, y tal como hizo Google con las pantallas con muesca, va a hacer una implementación del uso de pantallas plegables en Android.

De esta forma habrá una forma estándar de gestionar la apertura y cierre de la pantalla, lo que permite incluir animaciones de desplazamiento de los elementos en pantalla entre tamaños de interfaz y que así no la tengan que realizar los desarrolladores de aplicaciones.

La idea de estos teléfonos es que tengan un uso como teléfonos de manera normal, y al desplegarlas que funcionen como tabletas, o algo parecido. El problema de fondo en realidad será que las aplicaciones tienen que estar optimizadas para el formato teléfono y el formato tableta, y eso en el ecosistema Android no es tan habitual.