La tendencia actual del sector de los ordenadores es de ir a la baja, pero está afectando sobre todo al negocio de los centros de datos. Eso significa que Intel es la más perjudicada por su alto volumen de negocio que tiene en este sector, y se ha visto reflejado en la presentación de resultados del segundo trimestre de 2019.
Intel ha ingresado menos en el trimestre, situándose la cifra en los 16 500 millones de dólares frente a los 17 000 M$ del mismo trimestre del año pasado, mientras que los beneficios también han descendido de los 5300 M$ de hace un año a los 4600 M$ del segundo trimestre de este. El margen bruto ha disminuido ligeramente hasta el 59.8 %, si bien es una buena subida respecto al 56.6 % que tuvo en el primer trimestre del año.
La división de Computación de Cliente ha mejorado un 1 % sus ingresos situándose en los 8800 M$, y es la encargada de los procesadores de sobremesa y portátiles de uso generalista. Intel ha indicado que ha visto mejorada sus ventas de procesadores de alto rendimiento, los cuales dejan más margen de beneficio.
La división de Centros de Datos se ha dejado un 10 % de ingresos hasta situarse en los 5000 M$, mientras que la división de Internet de las Cosas ha mejorado un 12 % hasta los 986 M$, la de Mobileye —vehículos autónomos— ha mejorado un 16 % hasta los 201 M$, la de Soluciones de Memoria No Volátil ha perdido un 13 % hasta los 940 M$ y la de Soluciones Programables ha perdido un 5 % hasta situarse en los 489 M$.
El actual estado del mercado de las unidades de estado sólido ha hecho que tenga un sobreabastecimiento de memoria NAND a la que no puede dar salida, aunque espera que mejore en los próximos meses. Intel también ha visto un retroceso del 2 % en las ventas de procesadores para portátiles, y un 11 % en las ventas de procesadores para equipos de sobremesa.
Vía: WCCFTech.