Las unidades de estado sólido PCIe 4.0 corren el riesgo de funcionar a altas temperaturas en un uso continuado. No suele ser habitual en las tareas del día a día, pero hay momentos en el que puede darse el caso, como por ejemplo al mover a una unidad gran cantidad de información de otra. Gigabyte ha adaptado su serie 7000s de formato M.2 2280 con una edición AORUS Gen4 7000s Prem. con un enorme disipador con dos caloductos, lo que lleva su altura hasta los 44.7 mm.
Este sistema de refrigeración tiene el poco original nombre de protección térmica extrema (thermal guard xtreme), es de color negro y tiene un recubrimiento de nanocarbono. La base es de aluminio y se sitúa una almohadilla térmica de alta transferencia en cada uno de los lados de la SSD. El mayor problema que le veo es que no entrará en todas las ranuras M.2, y si está limitada la velocidad PCIe 4.0 a una de las ranuras de la placa base, generalmente a la que queda debajo o cerca de la refrigeración del proceasdor, habrá que tenerlo en cuenta a la hora de comprarla.
Pero con este sistema Gigabyte está muy segura de que no habrá limitación térmica en el rendimiento y por tanto alcanzará los 7000 MB/s de transferencia máxima de lectura secuencial que tiene especificada. Las unidades son las mismas 7000s de partida, con hasta 6850 MB/s de escritura secuencial y hasta 650/700 kIOPS de lectura/escritura aleatoria de archivos de un tamaño de 4 kB. La durabilidad alcanza los 1400 TB y tiene una garantía de cinco años.
El controlador usado es un PS5018-E18 de Phison, compatible con cifrado AES-256, con una DRAM de 1 GB de caché y una NAND SLC de búfer. Integra chips NAND 3D de tipo TLC.
Vía: Guru3D.