Apple abrió la veda con sus procesadores serie M para que el sector PC se tomara en serio las ventajas de la arquitectura ARM de la empresa británica homónima. Qualcomm está preparándose para el lanzamiento de los Snapdragon X el próximo año, cuatro años después que Apple, mientras que los últimos rumores apuntan a que AMD y NVIDIA también se meterían en este sector de los procesadores ARM para el sector PC.
La ventaja principal es que ofrecen un rendimiento por vatio muy superior al de los procesadores de arquitectura x86, y realmente lo ofrecen sin ninguna pega destacable. Todo depende de cómo se modifique el diseño base de núcleos que licencia Arm para ponerlos en línea con las necesidades del sector PC. Apple ha demostró que se podía hacer.
Aunque hay versiones de los procesadores de Intel y AMD que consumen poco, sobre 15 W, eso en realidad es a frecuencia base. Cuando se activa el turbo, pueden consumir muchísimo más. Los procesadores de Apple consumen en torno a eso dando un buen nivel de potencia, y con un consumo en reposo que es mínimo. Mientras estoy escribiendo esto desde un Mac Studio con un M1 Max el equipo completo solo está consumiendo 14 W, y eso que hay alguna cosa funcionando en segundo plano.
Estos procesadores de NVIDIA y AMD, la primera más conocida por sus tarjetas gráficas pero que intentó comprar Arm y le salió mal, estarían orientados a equipos con Windows, por lo que Microsoft estaría implicado en el desarrollo. De hecho esto es algo que ha intentado Microsoft por activa y por pasiva desde 2016, pero que ahora podría haber encontrado a NVIDIA y AMD como socios destacados. La primera tiene amplia experiencia en las CPU de arquitectura ARM, mientras que la segunda ha creado en el pasado algún procesador de este tipo para servidores, y nunca ha descartado la creación de procesadores ARM.
Aparentemente el lanzamiento de estos procesadores de tipo ARM para PC, que serían principalmente para portátiles, llegaría en 2024, que es cuando Qualcomm también llegarían los equipos con los Snapdragon X. Por tanto esto podría ser más bien el plan de Microsoft de poner el foco en los procesadores ARM para Windows, lo que abriría la puerta a poder competir cara a cara con los MacBook de Apple en el terreno de la autonomía. Pero también serían muy malas noticias para Intel porque implicaría que la industria empezaría a desengancharse de los x86.