El Ryzen 7 8700G es el procesador de sobremesa que mejor unidad gráfica integrada tiene, al menos para clónicos por lo que dejo a los Mac en su propia liga. Esa unidad es una Radeon 780M de 768 sombreadores a 2.9 GHz siendo de arquitectura RDNA 3. Como no es nueva, se sabe bien que se queda cerca de la GTX 1650 de sobremesa, aunque a cierta distancia, siempre dependiendo del juego. Pero al ser un modelo de sobremesa, se le puede subir frecuencias, y en ese caso empata con la tarjeta gráfica de NVIDIA.
Al tener un diseño monolítico el sistema de memoria tiene menos problemas (y latencia) que el de chíplets que usa AMD para sus procesadores más potentes, tanto de portátiles como de sobremesa. Eso permite por ejemplo que hayan podido subir la frecuencia de la memoria de manera estable hasta los 8400 MHz, mientras que la iGPU funciona, para empatar con la GTX 1650, a 3.4 GHz, 500 megahercios más. El resultado es una mejora del rendimiento del 17 % en 3DMark Time Spy, y un empate técnico en esta prueba. Habría estado bien ver los resultado con DDR5-6000 con esa subida de la iGPU.
Vía: TechPowerUp.