Arm desarrolla sus nuevas arquitecturas de CPU y GPU teniendo en cuenta las ganancias que se obtienen con las litografías punteras, y no tanto por lo que se gane de rendimiento o se reduzca el consumo, que también, sino por el aumento de complejidad que permiten en los diseños. Ahora la compañía británica ha anunciado una colaboración con Samsung Foundry para adaptar sus próximos Cortex-A y Cortex-X a la litografía de 2 nm de la compañía.
Esta se espera que entre en producción en masa en algún momento de 2025, por lo que el Snapdragon 8 del próximo año se beneficiará de ello, aunque no se ponga a la venta en dispositivos hasta 2026. Al final Arm hace todo el desarrollo de los núcleos, pero también licencia diseños ya personalizados para ciertas litografías por lo que el diseño de los procesadores se simplifica bastante. Le viene bien a compañías como MediaTek que siempre se acogen a los diseños estándar de Arm para ahorrar costes, aunque Qualcomm suele hacer sus propios cambios por lo que no saca una ventaja de estas optimizaciones de Arm.
Vía: Tom's Hardware.