La llegada de los Ryzen 9000 ha sido tibia porque a AMD se le ocurrió venderlos a un PVPR muy alto que posteriormente ha tenido que bajar y ahora, más de dos meses después, están sustancialmente más baratos. Sí, son buenos procesadores, pero que llegaron a un mal precio. El 9600X estuvo a un PVP de 300 euros el primer mes por un 10 % más de potencia multinúcleo y un 3 % más de rendimiento en juegos con una RTX 4090 —mejora nula con cualquier otra tarjeta gráfica— respecto al 7600X costando este unos 210 euros. Ahora el 9600X está sobre los 260 euros, pero aun así… en fin. Así que las miradas están puestas en la siguiente generación Ryzen que no llegaría hasta finales de 2026 o principios de 2027.

El despropósito de la actual generación de procesadores es evidente y va a haber que lidiar con él dos años más, porque el rumor sigue la cadencia de actualización de dos años que está siguiendo AMD. Nada nuevo. Al menos los Ryzen 9000 irán bajando de precio, aunque soy de la opinión que con RTX y la interpolación de fotogramas cada vez es menos necesario tener los mejores procesadores para mover las mejores tarjetas gráficas.

Esos futuros Ryzen de sobremesa, que es probablemente que cambien a una nomenclatura tipo «Ryzen 500 AI» o similar, mantendrían el uso del zócalo AM5 que es una de las cosas que mejor está haciendo AMD: darle vida durante años y años a sus zócalos de procesador. Aunque eso sí, ha intentado varias veces abandonar la actualización de BIOS de los chipsets más antiguos, pero ante la indignación de los consumidores siempre ha dado marcha atrás. Esos procesadores usarían Zen 6, que espero sinceramente que aporten mucha mejora mononúcleo que es lo fundamental en juegos. Ahora mismo Apple domina con el M4 Max las pruebas de rendimiento mononúcleo y multinúcleo, y es de esperar que en un año mejore aún más con el M5 Max. Mal panorama.

Vía: WCCFTech.