La industria de semiconductores ha cobrado una importancia estratégica para Estados Unidos, especialmente tras los problemas en la cadena de suministro global durante la pandemia. Con el objetivo de reducir su dependencia de proveedores extranjeros y fortalecer su capacidad local, el Departamento de Comercio de los Estados Unidos ha confirmado la subvención a TSMC de 6600 millones de dólares. Se engloba dentro de los fondos de la Ley de CHIPS y Ciencia destinado a la construcción de tres fábricas de chips avanzados en Phoenix (Arizona, EUA).
TSMC, reconocido como el mayor fabricante de semiconductores por contrato a nivel mundial, ha incrementado su inversión en Arizona de 25 000 millones a 65 000 millones de dólares. Este proyecto representa la mayor inversión extranjera directa en fábricas de chips dentro de los EUA. Las instalaciones producirán chips hasta a 1.6 nm para aplicaciones en inteligencia artificial, vehículos autónomos y dispositivos móviles. La primera fábrica está construida y se espera que empiece a producir en masa en la primera mitad de 2025 a 5 nm y derivadors, la segunda debería entrar en funcionamiento en 2028 a 3 nm, y la tercera a final de la década a 2 nm y derivados como la litografía de 1.6 nm.
Además del subsidio, TSMC podría recibir hasta 5000 millones de dólares en préstamos gubernamentales. Como parte del acuerdo, la empresa deberá compartir con el gobierno estadounidense cualquier ganancia que supere las proyecciones iniciales y se compromete a no recomprar acciones durante los próximos cinco años.
Este anuncio llega en un momento de incertidumbre política, ya que el presidente electo Donald Trump ha expresado críticas hacia la Ley de CHIPS y Ciencia. No obstante, la administración actual ha acelerado la asignación de fondos para asegurar la continuidad de estos proyectos estratégicos antes del cambio de gobierno de acuerdo con los compromisos adquiridos por Biden con Taiwán.
Vía: WCCFTech.