Las SSD de tipo SATA siguen vendiéndose, aunque no en tanta cantidad como antes. La incorporación generalizada de ranuras M.2 2280 desde hace tres o cuatro años incluso en las placas base de chipsets más baratos ha reducido su uso. En las de chipsets más caros, con tres o cuatro ranuras M.2, incluso cinco, su necesidad es nula. Aun así, son un buen recurso para una carcasa externa porque el rendimiento no se ve tan limitado y son cajas baratas por ser SATA y no PCIe. Una de las series más populares incluso este último viernes negro, la MX500 de Crucial, ha sido descatalogada por la compañía.

Así lo ha indicado un portavoz de la compañía a una pregunta de ComputerBase. «La MX500 fue una gran unidad. Estamos haciendo espacio en el catálogo para nuevos productos y esperamos compartir dentro de poco nuestras novedades».

No creo que las SSD de tipo SATA, que son mayormente en formato de unidad de 2.5 pulgadas, vayan a irse a ninguna parte en los próximos años, pero se irán vendiendo cada vez menos. Su coste por giga es similar a las unidades PCIe 4.0 actuales, pero como no todas las placas base tienen espacio para muchas M.2, es una solución para ampliar el almacenamiento. También se puede recurrir en algunos casos a una tarjeta PCIe 3.0/4.0 ×16, pero con el tamaño de las tarjetas gráficas actuales, incluso en la gama media, puede ser inviable. Como digo, siguen siendo útiles para muchos consumidores.

Vía: Tom's Hardware.