Análisis: OnePlus 13R review en español

Para la gama alta actual no hace falta recurrir al mejor procesador del momento siempre que el resto de características acompañen bien. Es lo que ofrece OnePlus con el 13R, un modelo de gama alta con un procesador de hace más de un año, pero que sigue ofreciendo un gran rendimiento general y gráfico. Pero también ofrece un diseño interesante, un sistema de cámaras competitivo y una altísima autonomía, por lo que con la escalada de precios en la gama alta por encima de los mil euros, su precio en torno a los 750 euros hace que sea aún más interesante.

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Análisis: OnePlus 13R review

Desembalado y características

El 13R llega en una caja roja sin prácticamente información sobre el dispositivo en la parte posterior. Al abrirla se ve una carpeta de cartón en la que se incluye un cable de carga USB tipo C a USB tipo A, una guía de usuario y un manual de seguridad y conformación legal.

Debajo ya está el móvil, con una lámina de papel para su protección. No se incluye cargador en la UE por la normativa vigente sobre residuos electrónicos. En otras regiones es posible que sí lo incluya, y vaya por delante que se necesitaría un modelo de 80 W SuperVOOC al ser un sistema de carga propietario. La batería es de 6000 mAh, siendo de la última hornada que ha aumentado notablemente la densidad de energía así que el móvil no es especialmente grueso.

El teléfono da muy buena sensación en la mano con su diseño en aluminio, de cantos planos, y se nota bien equilibrado. Tiene un tamaño de 161.7 mm × 75.8 mm × 8 mm y pesa 206 g. Podría ser un poco escurridizo, pero lo justo debido al mayor peso en la parte superior, y que al sacarlo del bolsillo podría descompensar el agarre. Pero nada fuera de lo normal, así que hay que tener cuidado. Tiene cierta resistencia al agua y polvo con su certificado IP65, que no permite sumergirlo y puede saber a poco.

En el lateral derecho tiene los habituales botones de volumen e inicio. En el izquierdo hay un interruptor de tres posiciones: sonar, vibrar y silencio. Creo que son autoexplicativas. En la inferior hay una toma USB-C para datos y recarga de 80 W, uno de los altavoces, micrófonos, y bandeja para dos nano-SIM. En la superoir hay un control infrarrojos y otro micrófono. El móvil incluye Wi-Fi 7, Bluetooth 5.4, NFC y 5G.

La pantalla es de 17.2 cm (6.78 in) de tipo AMOLED de bastante buena calidad de imagen. Tiene una resolución de 2780 × 1264 píxeles y un refresco de 120 Hz, la cual alcanza los 4500 nits de brillo máximo en HDR, 1600 nits en automático. Es de bajo consumo (LTPO 4.1), cubre el 100 % de la escala DCI-P3 y tiene color de 10 bits. Está protegida por Gorilla Glas 7i. Como comentaré en su apartado, es una pantalla bastante buena.

Hay una cámara de 16 Mpx y ƒ/2.4 en un balazo en la parte superior central, y un lector de huellas en pantalla en la parte central inferior. El desbloqueo es rápido, es de fácil configuración y no me ha dado problemas. El auricular funciona de segundo altavoz, y ambos están bien equilibrados en una disposición estéreo.

El diseño de la parte trasera me gusta en este color blanco, teniendo círculos concéntricos que se ven lo justo para quedar bien, y está el logo de OnePlus en un tono plateado. En la prominencia circular añade unos tres milímetros al grosor del móvil, por lo que es más bien de unos 11 mm en total. Al tocar la pantalla en la parte superior izquierda se puede bambolear un poco.

El sistema de cámaras incluye una de 50 Mpx y ƒ/1.8 con OIS, una de 50 Mpx y ƒ/20 de zum óptico de dos aumentos, y una de 8 Mpx y ƒ/2.2 de ultra gran angular de 112º. Como se verá más adelante, se portan más que bien tanto de día como de noche, y también grabando vídeo, aunque la de ultra gran angular es la pata coja del sistema.

Rendimiento

El procesador del 13R es un potente Snapdragon 8 Gen 3 de Qualcomm, que puede que no sea el mejor del mercado pero tiene gran potencia ya que era el mejor en la primera mitad de 2024. Está acompañado de 12 GB de RAM de tipo LPDDR5 a 4800 MHz (9600 MT/s), por lo que el procesador y su iGPU tienen 76.8 GB/s de ancho de banda. Está acompañado de 256 GB de almacenamiento UFS 4.0, por lo que sigue siendo un procesador de gama alta.

CPU

La parte de CPU de este procesador está compuesta por un núcleo Cortex-X4 a 3.3 GHz, un clúster de tres Cortex-A715 a 3.2 GHz, otro clúster de dos Cortex-A720 a 3 GHz, y otro de dos Cortex-A520 a 2.3 GHz. Muy variado porque cada uno es mejor para distintos tipos de carga. El principal servirá bien para tareas mononúcleo como por ejemplo los navegadores.

El rendimiento del Snapdragon 8 Gen 3 es estupendo, de primera línea, y probablemente sea mucho más de lo que necesita cualquier usuario normal. Todo va superfluido, desde la apertura de aplicaciones hasta la interfaz, y en tareas que pudieran ser más intensivas de CPU, como edición de vídeo, también lo va a hacer perfectamente.

GPU

La unidad gráfica integrada es una Adreno 750 a 903 MHz, que da un rendimiento muy alto al dispositivo, con 2.8 TFLOPS de potencia de cómputo. Aprovechará a la perfección los 120 Hz de la pantalla en juegos incluso a su alta resolución, si es que están adaptados para funcionar así con ella. El cambio automático no funciona especialmente bien en este móvil, y los juegos funcionarán a 60 f/s a pesar incluso de forzar la pantalla a 120 Hz.

Con los juegos no va a tener problema. Diablo Immortal lo moverá a 60 f/s a calidad gráfica 'muy alta', resolución 'alta' porque no deja cambiar a 'ultra', y con 'nitidez de imagen' activado y otros ajustes opcionales también activados. Incluso el trazado de rayos, ya que aunque la Adreno 750 no tiene núcleos de este tipo, sí puede ejecutar de manera más o menos eficiente las tareas más sencillas de trazado de rayos como son las sombras y los reflejos. Devil May Cry se puede poner a calidad gráfica 'extrema' a 60 f/s, aunque de vez en cuando pega algún tirón o se nota que ronda los 30 f/s en lugar de los 60 f/s, sobre todo en los cortes, aunque la experiencia de juego es satisfactoria.

En cuanto a las pruebas sintéticas, en una prueba como 'Car Chase' de GFXBench alcanza los 60 f/s por lo que no aprovecha la pantalla, o los 155 f/s emulando funcionar a FHD sin la limitación de la pantalla. En 'Aztec Ruins' también de GFXBench alcanza los 227 f/s a FHD. Otra prueba más exigente, 3D Mark Wild Life, alcanza los 16848 puntos a QHD y los 4870 puntos a UHD, por lo que mira de tú a tú al A18 Pro del iPhone 16 Pro. Es una iGPU sensacional para un móvil.

NPU

La NPU de este procesador es una Hexagon, que como cualquier otra Hexagon, la ha usado tradicionalmente para el procesamiento de imágenes de la cámara pero ahora puede ejecutar más eficientemente tensores para inferencias de IA. La potencia es de unos 5 TOPS en Geekbench AI, bastante por detrás de la potencia que tienen las NPU de los procesadores de Intel, Apple y AMD.

Almacenamiento

En cuanto a los 256 GB de almacenamiento, son de tipo UFS 4.0, por lo que proporciona un alto rendimiento. En este caso, en PCMark el móvil alcanza los 3000 MB/s de lectura/escritura secuencial, mientras que la lectura/escritura aleatoria se queda en los 36/64 MB/s. No es la prueba más fiable del mercado, sobre todo en lo referente al aleatorio, pero es un almacenamiento de altísimo rendimiento.

Pantalla

El OnePlus 13R cuenta con una pantalla AMOLED (LTPO 4.1) de17.2 cm (6.78 in) con una resolución de 2780 × 1264 píxeles, lo cual arroja una densidad de 451 PPP, así que se ve totalmente nítida. La reproducción de color es muy buena ya que cubre totalmente la gama de color (Display) P3. Alcanza un brillo máximo de 800 nits en manual, 1800 nits en automático y 4500 nits de pico al reproducir en HDR, siendo compatible con HDR10+ y Vision. No va a haber ningún tipo de problema para usarla en exteriores. Está protegida por Gorilla Glas 7i.

Su refresco es de 120 Hz, que se aplica principalmente a la interfaz y algunas aplicaciones preinstaladas, pero no lo suelen detectar adecuadamente la mayoría de aplicaciones. En las aplicaciones compatibles, se nota la fluidez extra de desplazamiento. Se puede elegir que cambie automáticamente entre 60 Hz y 120 Hz según el contenido, o forzar cualquiera de los dos modos. En mi caso lo he dejado siempre en automático porque al final da igual. Los juegos van a caparse en los 60 Hz igualmente.

La calidad del HDR es especialmente buena, y en ello como siempre apoya mucho que sea un panel OLED. La calidad en Display P3 es mejor que DCI-P3 porque usa la curva sRGB y D65 de temperatura de color, por lo que queda más natural. DCI-P3 se usa para cine digital, que no es el formato adecuado para una pantalla del hogar. Además Display P3 es la escala de color usada por Apple, así que eso afecta mucho al sector.

En cuanto a los modos de color, se puede cambiar en los ajustes entre un modo 'intenso', que es un espacio de color saturado con un color más frío, y uno 'natural' que cubre la escala de color sRGB y es bastante preciso. Luego hay dos modos profesionales, uno 'cinemático', que cubre la escala de color Display P3, y uno 'brillante' que tiene un color más frío para que hagan mayor contraste los colores pero pierde bastante precisión. Al final el que he usado principalmente es el Display P3, porque al usar sRGB como base se ve bien el contenido web, los juegos y los vídeos por igual.

Autonomía

La batería de este móvil es de 6000 mAh. Puede usar carga de hasta 80 W, pero no se incluye un cargador con él por las leyes de residuos de la Unión Europea que se están aplicando también en otras partes del mundo. Se podría echar en falta carga inalámbrica o carga inversa, que es algo que sí tiene el OnePlus 13. Así que para probarlo he usado un cargador USB-C de 100 W que uso con portátiles y otros dispositivos.

Con este móvil solo ha alcanzado los 30 W de recarga, aunque con un amperaje alto. Eso ha hecho que se recargue el móvil totalmente en una hora y diecisiete minutos, así que no ha aprovechado los 80 W de carga máxima que tiene el móvil. La parte posterior se ha recalentado un poco, pero sin llegar a ser incómodo de usar.

Para aprovechar la carga rápida parece que hay que comprar el cargador propietario SuperVOOC de la compañía, que cuesta unos 35-40 euros y se recargaría totalmente desde cero en unos cincuenta minutos. Sin embargo, en esos cincuenta minutos mi cargador de 100 W le da tiempo a recargar un 88 % de la batería del 13R, así que la inversión no me merecería la pena. Ese último 12 % lo hace bastante lento con mi cargador y precisa de unos veinticinco minutos para completarlo.

He hecho una calibración de la pantalla a 200 nits, un nivel más que suficiente para ver bien la pantalla en interiores con una iluminación natural o artificial, y he puesto un vídeo en bucle a reproducirse en YouTube por 5G, evitando la caché. La autonomía se ha ido a las veintidós horas de reproducción de vídeo. Si se sube el brillo a los 400 nits, puede aguantar sobre las quince horas.

Jugando también tiene una alta autonomía, aunque depende del título. Con Devil May Cry se podría jugar durante cinco o seis horas porque no hace un uso especialmente alto del procesador, ni siquiera con todo a máxima calidad. Así que en un uso del día a día con la pantalla a esos 200 nits, con aplicaciones de chat, algún vídeo, alguna llamada y alguna otra aplicación normal como las de correo o calendario, la autonomía va a serie de dieciséis a dieciocho horas, según si se usan aplicaciones más o menos exigentes. Es una gran autonomía gracias a un procesador eficiente y una pantalla de bajo consumo.

Cámaras

La cámara principal del 13R tiene un sensor LYT-700 de Sony, que es de 50 Mpx y ƒ/1.8 con estabilizador óptico de imagen (OIS), PDAF y graba vídeo hasta a 4K y 60 f/s. La secundaria es de zum óptico, tiene un sensor ISOCELL JN5 de Samsung de 50 Mpx y ƒ/2.0 y graba vídeo hasta a 4K y 60 f/s. La terciaria es de 8 Mpx ƒ/2.2, con sensor IMX355 de Sony, siendo de ultra gran angular de 122º y esta puede grabar a solo FHD y 30 f/s.

En cuanto a la aplicación de Cámara, tiene la organización habitual de Android, y básicamente en cada modo fotográfico se meten todas las opciones que tiene, organizadas de la manera oportuna. Los modos se pueden reorganizar, mostrándose los típicos por defecto, pero desde la pestaña 'más' se pueden llevar como pestaña a la zona inferior. Nada nuevo. Las cámaras de ultra y zum van incluidas en cada apartado de 'foto', 'vídeo', etc. Se puede grabar vídeo en LOG o MP4 y las fotos se pueden guardar en HEIC o JPG.

Con el modo 'Pro' se pueden guardar las fotos en DNG de cualquiera de las tres cámaras, permitiendo una buena edición a través de Photoshop u otros programas de retoque fotográfico. Se pueden corregir los problemas típicos que se pueden presentar en ciertas escenas, y por ejemplo de noche siempre se puede eliminar mejor el ruido que introduce la cámara mediante las herramientas de IA de Photoshop.

De día

La sesión de fotos fue en un lunes de Semana Santa un poco nublado, que no son condiciones ideales, pero se puede comprobar en las fotos que incluso sin un sol radiante salen muy bien. Las he tomado sin el HDR automático para que salgan más naturales y en las condiciones del día no lo veía necesario, aunque en algunas fotos de hojas de árboles podría haber ayudado a conseguir más contraste, pero tampoco me parecía fundamental para probar las cámaras.

Las siguientes fotos las uso de control. La primera está sacada con una X-T4 y la segunda con la principal del 13R. No espero que una cámara de un móvil de 650 euros en este momento tenga la calidad de una cámara de 1500 euros, aunque tenga ya unos años, por lo que la foto de la X-T4 sale más natural, los colores y la escena. La del 13R tiene más detalle, pero el rojo está específicamente más saturado y arrastra a otros colores porque debería de verse más como la tonalidad roja de la X-T4. El 13R está sacando más luz de la que había realmente en la escena. También se puede apreciar que en las zonas de pequeñas sombras del agua intenta sobredefinirlas y al final queda raro, lo cual ocurre también en otros contextos.

Aquí tenéis varias fotos sacadas con la cámara principal que en general están bastante bien, con mucho detalle, buena exposición aunque como he comentado antes, el rojo está ligeramente saturado y arrastra a otros colores —como el rosa—, pero poco. Son fotos que en general son muy buenas. Son las mismas que iréis viendo sacadas con el resto de cámaras.

La cámara de zum óptico hace un trabajo bueno, similar a la cámara principal, aunque quizás exponiendo ligeramente más las fotos, y el color es ligeramente diferente, con un toque un pelín menos amarillento que le siente bien a los colores verdes. Es solo de dos aumentos, habría sido mejor que fuera de tres, pero hace una buena labor.

La cámara de ultra gran angular es la peor de las tres, por bastante, pero aun así son fotos perfectamente aprovechables con buena luz. Tienen menos detalle, quizás incluso ligeramente aguado si se amplían mucho, menos rango dinámico, pero de color es similar a las otras dos.

A continuación tenéis fotos en alta resolución (50 Mpx) de las escenas que he usado también con las cámaras, que salvo para fotos de muy cerca realmente no dan una calidad distinta al modo por defecto a la cámara principal. Son fotos tanto de la cámara principal como la de zum óptico.

Pero para fotos muy de cerca la ideal es la cámara de zum óptico. Captura muchísimo detalle, funciona muy bien a distancias de unos tres o cuatro centímetros, y en general es la que usaría para fotomacrografía.

En interiores la calidad de las tres cámaras es buena, pero la de ultra gran angular es la peor. Tiene tendencia a oscurecer más la escena que en exteriores, le falta un poco de detalle, y a veces falla con dónde enfocar. Aun así me parece una cámara correcta, aunque dista de ser mejor para un móvil caro como el 13R.

De noche

La calidad de grabación nocturna es bastante buena en la cámara principal y de zum óptico, con mucho detalle, buena exposición, saturación y con muy poco ruido. La cámara de ultra gran angular pierde mucho detalle, notándose los bordes algo aguados, pero sirve bien porque reduce mucho el ruido. Si hay muy poca luz, el modo 'noche' de la cámara ayudará mucho a aclarar las zonas más oscuras, sin introducir ruido, y respetando la escena. La de ultra gran angular oscure muchísimo las fotos de noche.

Cámara frontal

La cámara frontal es de 16 Mpx y ƒ/2.4 de enfoque fijo, con sensor S5K3P9 de Samsung y graba vídeo a FHD y 30 f/s. Mantiene un buen nivel de detalle aunque pierde frente a la principal, y la reproducción de colores es buena tanto en interiores como exteriores. Creo que nunca he usado la frontal para ninguna foto, así que tampoco es una que personalmente me interese.

Vídeo

La captura de vídeo en general está bastante bien, tanto a FHD y 60 f/s como a UHD y 60 f/s en las cámaras principal y de zum óptico. Estabiliza bien la grabación con ambas cámaras. Conservan bien el detalle, pero el color puede estar un poco apagado aunque nada grave. La de zum óptico da una calidad similar, aunque con un poco menos de rango dinámico.

Hay un modo de ultraestabilización que limita a FHD y 60 f/s y cumple bien su función si por ejemplo se está corriendo. La cámara principal puede grabar a cámara lenta a FHD y 240 f/s, con suficiente calidad, generando vídeos totalmente aprovechables. También hay un modo 'película' que permite más control sobre la cámara y que además permite grabar en LOG para posproducción.

Audio

Este móvil llega con altavoces estéreo en una disposición asimétrica, pero están bien equilibrados para ser un móvil de gama baja. Llega a un volumen alto, sobre los 83 dB, con una calidad bastante buena para el tipo de altavoz que es, y sin distorsiones, medido a una distancia normal de visualización de la pantalla del móvil.

Obviamente su calidad da para la que da. Los subgraves se pierden por debajo de los 50-60 Hz, pero las frecuencias medias están bien representadas y las altas son más volátiles. Pero en general proporciona un sonido bueno, con un sistema estéreo bien equilibrado, y que hará que se pueda disfrutar de la música de manera adecuada, teniendo en cuenta el formato.

Software

La versión de Android instalada es la 15, y llega con la capa de personalización OxygenOS 15.0. OnePlus promete cuatro actualizaciones mayores del sistema operativo y seis años de parches de seguridad, así que ese frente no está del todo mal cubierto, pero podría ser mejor. Hay una buena cantidad de aplicaciones preinstaladas, que serán útiles o no según el usuario. A mí casi ninguna me sirve de las de Netflix, Booking, Amazon Music, LinkedIn, Amazon, AliExpress, etc., salvo las de Google, y hay otras de la propia OnePlus que son unas quince para de todo un poco pero que personalmente no necesito.

El área de notificaciones cambia un poco en colores y muestra un montón de ajustes posibles, barras de luz y voz, pero no es tampoco muy muy distinto de lo que ofece Android 15 puro. La zona de ajustes cambia en iconos, tonos y un poco la organización, pero tampoco cambia en exceso.

Lo que ha añadido OnePlus es una barra de herramientas que aparece al deslizar el dedo hacia dentro en la zona superior derecha de la pantalla. Vienen a ser atajos configurables a aplicaciones y acciones como captura o grabación de pantalla. Me podría resultar útil al configurar ahí algunas aplicaciones que uso habitualmente, pero tampoco realmente uso muchas a lo largo del día, mayormente solo tres o cuatro.

Conclusión

El 13R de OnePlus es un modelo de gama alta muy interesante por precio y características. A su diseño no hay nada que objetarle, con buenos acabados y buena calidad de fabricación. Lo único es que una certificación IP65 sabe a poco, pero no será problemático para la mayoría. La inclusión de un interruptor de silencio en el lateral es un añadido que es útil. La protusión de cámaras traseras tiene un diseño discreto y queda bien.

La pantalla es de alta calidad, con un HDR de alto brillo, aunque la parte del refresco de 120 Hz no siempre se aprovechará. El sistema de altavoces estéreo tienen un buen sonido para lo que permiten este tipo de altavoces, alcanzando un alto volumen sin distorsión.

La fluidez del móvil en el día a día es perfecta. El procesador Snapdragon 8 Gen 3 es estupendo, aunque no sea el mejor de Qualcomm, pero fue el mejor del año pasado y no ha habido tampoco tanta evolución en gráficos de los juegos en móviles, así que puede mover cualquiera a máxima calidad y fluidez. Pocos aprovecharán los 120 Hz de pantalla, pero es lo habitual porque no están adaptados.

El sistema de cámaras es bastante bueno y no hay pegas con la principal y la de zum óptico de dos aumentos. Sacan fotos muy buenas de día y de noche, con buen detalle, exposición y saturación, y son también muy competentes para grabar vídeo hasta a 4K y 60 f/s con una adecuada estabilización. La cámara de ultra gran angular desentona por calidad de fotos y vídeo, aunque sean perfectamente aprovechables. No acompaña bien a las otras dos. La de selfis acompaña mejor al móvil para su propósito.

La autonomía es una pieza clave del móvil. Los 6000 mAh obran milagros junto al procesador y la pantalla de bajo consumo para dotarle de incluso veinte horas de reproducción de vídeo, o quince horas en un uso variado de aplicaciones. Eso significa que nunca habrá que temer por quedarse sin batería a mitad del día por mucho que se use. Da incluso para meter juegos en la ecuación, una o dos horas ideales para viajar en transporte público, lo cual llevaría más a una autonomía suficiente para regresar a casa tras un día de trabajo.

Así que el 13R tiene muy pocas pegas reales para lo que cuesta y lo que ofrece. Para la mayoría de usuarios les será un gran móvil con el que además se aseguran cuatro años de actualizaciones, que me resulta quizás pocos para los cinco a siete que ofrecen otras compañías, pero seguirá sirviendo durante más años por la potencia y lo buen móvil que es.

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