Muchos padres extrañados oyen cada vez con más frecuencia de boca de sus hijos eso de "de mayor quiero ser jugador profesional de videojuegos", y estos se suelen llevar las manos a la cabeza hasta que escuchan también el premio que algunos torneos de videojuegos entregan a los vencedores. Justo ahí suelen cambiar las opiniones.
Ligeramente por debajo en popularidad respecto a League of Legends, donde no recorta el MOBA de Valve es en premios, donde supera ampliamente al primero y de hecho, bate su propio récord del mayor premio entregado en un torneo de esports que va por 18.771.084 dólares y subiendo. El año pasado la cifra se quedó en 18.429.613 $ a repartir entre los ganadores.
Para alcanzar estas cifras, Valve mantiene un curioso sistema de micromecenazgo en el que la propia compañía aporta 1,6 millones iniciales mientras que el resto se consigue con aportaciones de los jugadores al comprar un pase de batalla, por el que reciben diferentes aspectos, emoticonos o escenarios; y si además se supera el premio del año pasado (como ha sido el caso), todos los que hayan adquirido el pase de batalla recibirán tres cofres con objetos aleatorios de alto nivel.
Aun tienes dos semanas para entrenar y poder llevarte este jugoso premio en el torneo que se celebrará en el KeyArena de Seattle, y si no llegas a tiempo, siempre lo podrás disfrutar como si estuvieras en el campo de batalla gracias a la interfaz de realidad virtual que estan preparando para el torneo, donde se podrán disfrutar las partidas y sus repeticiones desde tódos los ángulos y que será compatible con las HTC Vive.