Si alguna vez has llamado a alguno de tus amigos Chaaaaaaarlie, te sabes la canción del Rey Banana o has hablado por horas con una voz aguda y exasperante; es porque has sido uno de los millones de internautas que han tenido el tiempo libre suficiente para ir a YouTube y mirar las desventuras de Charlie, el unicornio. Un fenómeno viral que ya cumple once años desde que fuera publicado.
La trama de la serie de vídeos animados es, básicamente, ninguna. En cada episodio Charlie, un unicornio gris de muy mal carácter viaja por escenarios completamente absurdos junto a dos tontos unicornios que siempre terminan jugándole una mala pasada, como robarle un riñón.
Luego de cuatro episodios, Jason Steele, el creador y miembro de la productora independiente FilmCow, decidió crear una campaña de financiación en Kickstarter para llevarle al mundo el gran episodio final de su tonta saga.
La campaña se lanzó el 23 de febrero y solo dos días logró alcanzar su meta, gracias a que FilmCow ofreció recompensas a sus fanáticos: peluches a quienes aportaran 120 dólares y crear un dibujo personalizado para quien aportara 500.
En el vídeo de la campaña, Steele asegura que desde el año 2005 debido al gran éxito que tuvo su historia de unicornios en internet, ya se trazó el camino que la historia seguiría (aunque resulte difícil creerlo) y dice que terminará con el quinto episodio: "la narrativa de unicornios más genial de toda la historia a través de todas las dimensiones, según yo (Steele) la persona que se ha propuesto recaudar los fondos para ella".
Vía: Mashable.