Guste o no, Windows 8 y su Modern UI están aquí para quedarse. Por eso la versión de Windows Blue filtrada, la siguiente versión de W8, va a llegar con multitud de mejoras a la nueva interfaz del sistema operativo más usado en los PCs. Microsoft va a seguir una nueva política de actualizaciones de Windows, que van a seguir el modelo de OS X con actualizaciones anuales.
Aunque no se sabe el coste que tendrán para los usuarios finales de Windows Blue (ya que se trata de mejoras a Windows 8, no de una nueva versión del sistema operativo), entre las nuevas características se encuentra una mayor personalización de las Live Tiles (añadiendo un nuevo tamaño más pequeño de baldosa que se convierte en 1x1, y otro más grande de 4x4), más colores y personalización de la pantalla de inicio.
Con Windows Blue también llega Internet Explorer 11 con capacidad de sincronización de las pestañas del navegador entre distintos dispositivos, algo que ya cuenten los demás navegadores más importantes (Chrome, Firefox, Safari). Otras mejoras de IE11 vendrán en forma de compatibilidad con más características de HTML5 y CSS3, mejoras de rendimiento y estabilidad (lo normal), aunque no parece que vaya a ser una versión radicalmente distinta.
Otro añadido más que interesante (por fin) es que podremos establecer cara a cara dos aplicaciones en Modern UI ocupando más del 80% y 20% de la pantalla para cada una, con tamaños personalizables como 50-50 o poder ver tres aplicaciones a la vez. También mejoran el uso de varios monitores con Windows Blue, como podéis ver en el segundo vídeo más abajo. Son estas algunas de las cosas que le faltaban a Windows 8, aunque el aspecto visual siempre he opinado que deberían alejarse de los colores planos que predominan en el sistema operativo y darle un poco más de personalidad.
Windows Blue saldrá a la venta probablemente a finales de año como actualización de Windows 8, con una beta pública disponible antes del verano.