Otra compañía más ha proporcionado esta semana sus resultados del tercer trimestre, y en este caso son realmente buenos. Se trata de Samsung, que sigue revalidando su posición como una de las empresas más solventes del mundo tecnológico con unos ingresos de 9.600 millones de dólares en el tercer trimestre.
Se trata de un aumento del 26 por ciento con respecto al mismo trimestre del año anterior, pero ha advertido que en los próximos meses las ventas de smartphones irán ralentizando su crecimiento debido a una mayor competencia en el sector y una ralentización general del mercado a nivel mundial. Por eso espera que el siguiente trimestre el envío de smartphones desde fábrica sólo aumente entre un 1 y un 5 por ciento.
Este análisis del mercado lo ha aprendido por las duras con la venta del Galaxy S4, que pese a haber 'vendido' ya 40 millones de unidades en cinco meses, la compañía y los inversores esperaban haber batido un récord de ventas. Al final se ha quedado en que la alta competencia de la gama alta (HTC One, Xperia Z, iPhone 5) con diseños más cuidados que el plástico del S4 han hecho mella en sus espectativas. De hecho, el aumento de ventas de la división de móviles de Samsung ha procedido de los terminales de gama baja y media, y no tanto del S4 y el S3, que han sufrido esta ralentización de ventas en la gama alta.
El aumento de ingresos de la compañía ha procedido sobre todo de un fuerte aumento de las ventas en la división de chips, que ha conseguido duplicarlas gracias en parte a unos precios más favorables en la actualidad para los fabricantes. El precio de las memorias, como habréis podido comprobar si os habéis comprado un ordenador, han subido entre un 40 y un 70 por ciento.
Vía: TechCrunch.