En los últimos años hemos ido viendo cada vez más noticias procedentes de las grandes ciudades estadounidenses, sobre todo Nueva York, relacionadas con el robo de productos tecnológicos. De Apple, para más señas, con el iPhone como producto estrella. Su alto valor y gran demanda en EE.UU convierten a los que llevan uno en objetivos para los delincuentes.
Para combatir el aumento incesante de robos de smartphones, una de las propuestas del Fiscal General del Estado de Nueva York fue la de incluir un botón de autodestrucción en todos los teléfonos vendidos, también conocido como Kill switch. La función de ese botón virtual es eliminar completamente la información del terminal y dejarlo inservible.
Diversas compañías han aceptado voluntariamente la propuesta del Fiscal general: Apple, Google, HTC, Huawei, Motorola, Microsoft, Nokia y Samsung. De esta forma, en los equipos vendidos a partir de julio de 2015 se incluirá la opción de borrar e inutilizar remotamente los terminales y evitar así su reactivación sin el permiso del usuario.
El escollo realmente que había es que son las operadoras las que deben permitir el uso de este mecanismo en última instancia, pero finalmente tras un rechazo inicial el año pasado, parece que ahora han aceptado la propuesta. Suponemos que tras negociar lo que van a recibir del gobierno y fabricantes para implementarlo.
Empresas como Apple ya incluyen en su sistema operativo estas medidas, como el bloqueo de activación de iOS 7. Los demás sistemas operativos tendrán poco más de un año para implementar el botón de autodestucción. El acuerdo, obviamente, se limita a territorio estadounidense y de momento no hay noticias de que vaya a ser utilizado en otros países.
