Parece que Apple no puede lanzar al mercado un nuevo modelo de sus _______ (poner en el hueco lo que proceda) sin que se arme cierto revuelo. La presentación de un modelo de iMac de 21,5 pulgadas más barato es el último en recibir fuertes críticas hacia Apple. ¿El motivo? Que la memoria RAM está soldada a la placa base.
Desgracia. Tragedia. Pero ahora voy a centrarme en lo que nos ofrece este nuevo iMac y por qué es perfectamente lógico que Apple lo haya hecho así. Es algo muy rápido que se entenderá en unas pocas líneas.
El iMac cuenta con 8GB de RAM a 1600 MHz. Dato importante por que las placas para procesadores Intel Haswell (la generación actual de procesadores) que no tengan posibilidad de overclocking (el chipset adecuado) es la máxima velocidad que soportan. Por lo tanto, el usuario no sería capaz de obtener una mejora de rendimiento por poner 8GB de RAM a 1866 MHz, 2133 o cualquier otra cantidad. La RAM que incluye es la máxima que permite la placa base de Apple. Además que si quieres cambiar la memoria en los iMacs de 21,5 pulgadas tendrías que desmontar la pantalla ya que no es fácilmente accesible. Sólo apto para usuarios muy expertos.
Por otro lado, el procesador es un Intel Core i5-4260U. Está bien de potencia, ya que cuenta con 2 núcleos/4 hilos, y no dejará a nadie tirado que le de un uso de navegar por internet, programar aplicaciones, usar Office, y otras tareas básicas. Lo que la mayoría de la gente hace con sus portátiles, vaya. La gráfica no es especialmente potente, una Intel HD Graphics 5000 integrada en el procesador, por lo que servirá para jugar a juegos sencillos, y en 3D a resoluciones que no sean la nativa de 1080p (diría que a 1366x768 píxels como muchísimo).
Teniendo eso último en cuenta, funcionará con el Photoshop para hacer modificaciones ligeras y otros programas de edición, pero sin grandes alardes. Por esto 8GB es el máximo al que le vamos a sacar un mayor partido. 16GB sería tirar el dinero si lo quisiéramos poner en este equipo.
¿Que no guste que Apple cree equipos ultra integrados con poco o nulo espacio para que les metamos mano? Pues los manitas a los que les gusta Apple se decantan por montarse un Hackintosh. Este iMac, específicamente, está pensado para un usuario estándar, y más exactamente usuarios del sector educativo. Yo me encuentro entre los que nos gusta trastear y probamos con los hackintosh, aunque mi equipo habitual sea un MacBook Pro de mediados de 2012.
Por tanto que la memoria de este último modelo de iMac esté soldada a la placa base lleva a un recorte de gastos para Apple, y no reporta absolutamente ningún problema para los que lo compren. Otra cosa es que en los modelos más potentes, con gráfica dedicada como el iMac de 27 pulgadas, soldaran la memoria. Pero en este último modelo las bahías de memoria están perfectamente accesibles por que 16GB, para diseño, es un requisito casi obligatorio, y preferiblemente sin pasar por la cara caja de Apple.
