La marca más prestigiosa de procesadores para dispositivos móviles es Qualcomm gracias a la gran labor que ha estado desarrollando en los últimos años. Pero esta situación también le ha permitido mantener un control indirecto del mercados de los SoCs, y por eso el gobierno chino inició una investigación basada en las leyes antimonopolio del país.
El resultado ha sido bueno para los fabricantes de teléfonos y tabletas y malos para la compañía californiana: tendrá que reducir el precio de las licencias que concede a fabricantes por sus patentes, así como revocar el acuerdo que obliga a los fabricantes de móviles con las que trabaja a licenciar a Qualcomm sus patentes a la vez que no licenciar sus patentes a otros clientes con los que trabaja Qualcomm.
Desde el punto de vista de los reguladores chinos, esta actitud ha dañado la competencia en China en el sector, con empresas como ZTE y Huawei, que cuentan con 52.000 y 30.000 patentes respectivamente, como grandes perjudicadas. Además, Qualcomm tendrá que pagar una fuerte multa como consecuencia de la investigación a la que ha sido sometida la compañía.
Vía: GSM Arena.