Google está a punto de presentar la versión final de Android 6.0 Marshmallow, y como viene siendo habitual, la versión anterior, Android 5.x Lollipop, está en un punto bajo de adopción. Según las últimas estadísticas de Google, diez meses después de su distribución oficial sólo está instalado en el 21% de los dispositivos Android.

Es un problema tanto de Google (por no tomar las riendas de la distribución de actualizaciones), de los fabricantes (por no tomárselo en serio salvo para los terminales de gama alta) y de las operadoras (las que distribuyen en última instancia las actualizaciones a sus clientes). Así se están dando situaciones como la de Stagefright en la que la inmensa mayoría de dispositivos siguen siendo vulnerables.

Así las cosas, el problema de seguridad que se plantea para el ecosistema Android terminará reventando tarde o temprano, llevándose a algunas compañías por medio en la explosión. Mientras tanto, la mayoría de usuarios, el 39,2%, usan KitKat, y el 31,8% utilizan Jelly Bean. Menos da una piedra, porque al menos son versiones buenas de Android.

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Vía: Venture Beat.