Motorola presentó la semana pasada dos teléfonos exclusivos para el mercado estadounidense, pero uno de ellos, el Droid Turbo 2, se venderá internacionalmente como Moto X Force. Es una phablet de gama alta, con pantalla de 5,4 pulgadas QHD y 149 mm de altura, y una batería de 3.730 mAh para compensar la alta (e innecesaria) resolución de pantalla.
El procesador es un Snapdragon 810, con 3 GB de RAM, 32 GB de almacenamiento interno (opción de 64 GB) y lector de tarjetas microSD de hasta 2 TB. En el apartado fotográfico incluye una excelente cámara de 21 megapíxeles con grabación de vídeo a 4K, con una calidad que la va a hacer colarse directamente entre las 10 mejores del momento. Su diseño continúa el lenguaje visual de los teléfonos de la compañía, e incluirá opciones con tapa trasera de cuero.
Pero la electrónica del teléfono no es lo realmente importante. Por lo que destaca el Moto X Force es por su resistencia a golpes, y es el dispositivo para todos aquellos que quieren evitar gastarse un dineral en un teléfono y que por una caída tonta termine sin poder ser utilizado adecuadamente. Rick Osterloh, el director general de Motorola, lo ha demostrado en el vídeo que veréis a continuación.
Moto X Force se pondrá a la venta en Europa, Asia e Hispanoamérica en noviembre, pero por el momento sólo se sabe que costará 499 libras en Reino Unido por la versión de 32 GB, y 534 libras por la versión de 64 GB.