Los teléfonos que pueden ser cargados rápidamente consiguen su objetivo a costa de sacrificar el tiempo de vida de la batería. Teniendo en cuenta que hay muchos teléfonos en los que la batería no es extraíble esto no parece un buen negocio para el consumidor.
Huawei acaba de presentar su solución a esta disyuntiva, pues su nueva batería de ion de litio tiene un ánodo recubierto de grafito que permite la carga rápida sin afectar a la vida útil de la misma. Han presentado dos modelos, uno de 3.000 mAh que puede cargarse al 48% en cinco minutos, y otra de 600 mAh que en dos minutos se carga al 68%.
El cargador que ambas emplean es especial, y no se espera que la tecnología esté disponible a corto plazo en el mercado. No obstante, esto es un gran paso adelante que permite pensar en que tarde o temprano cargar la batería del móvil sin dañarla no sea algo que requiera mucho tiempo.
Vía: Engadget.
