La precisión de los dispositivos que hacen el seguimiento de funciones corporales, como el pulso cardíaco, en la electrónica de consumo a veces deja que desear. Según se reporta, este es precisamente el caso de Fitbit, cuyo pulsómetro en algunos productos podría ser bastante impreciso y estimar a la baja el número de pulsaciones por minuto.
Un grupo de usuarios ha presentado una demanda colectiva contra la compañía fabricante del dispositivo por publicidad engañosa, argumentando que puede ser potencialmente peligroso para la salud del usuario. En la demanda han citado múltiples casos en los que el ritmo cardíaco de una persona era mayor que la reportada por el dispositivo, como haber registrado solamente 82 pulsaciones en un caso en el que el usuario estaba realmente en 160.
Desde Fitbit rechazan las acusaciones, respaldando su tecnología y remarcando que sus productos no son equipamiento médico. Pero si realmente se los puede considerar como tales o no, será algo que los tribunales se encargarán de decidir.
Vía: EnGadget.
