En el marco del Mobile World Congress en Barcelona, la firma de antivirus Avast demostró con un sencillo (y perturbador) experimento el peligro al que se está expuesto cada vez que se conecta el teléfono a señales Wi-Fi públicas o desconocidas.
La compañía instaló varias redes abiertas de Wi-Fi o puntos de acceso en el Aeropuerto de Barcelona con nombres como Airport_Free_Wifi_AENA y Starbucks, para que los inocentes viajeros y sus acompañantes se conectaran a ellas sin ninguna sospecha. En tan solo unas horas, la compañía detectó que unos 2.000 usuarios utilizaron estas redes inseguras.
Después la compañía reveló el resultado de su arriesgado experimento. De los 2.000 usuarios que pasaron por el Aeropuerto de Barcelona, Avast pudo ver que el 61,7 % de las personas usaron Google para buscar información y accedieron a sus cuentas de correo electrónico en Gmail, pero también pudieron ver quienes usaron el Wi-Fi para acceder a sus cuentas personales de Facebook, Twitter, Spotify e incluso aplicaciones de citas.
Con este experimento, es lógico temer que la valiosa información de los móviles pueda estar a la merced de hackers. Pero varios expertos en tecnología aseguran que mientras no se acceda a aplicaciones que contengan datos personales, contraseñas o información de cuentas bancarias al estar conectado a algún Wi-Fi público, los datos permanecerán seguros.
Vía: Good Housekeeping.