Microsoft está trabajando en proporcionar utilidad y aplicaciones a sus gafas de realidad aumentada HoloLens. Sobre todo por su precio de 3.000 dólares por la versión de desarrollador. Una de esas aplicaciones será la telepresencia u holoportación como la llaman en Microsoft Research.
Para ello se necesita una habitación con cámaras 3D para recoger a las personas que hablan y el entorno en el que se encuentran, aunque el suelo también necesitará de unos indicadores especiales para eliminarlo de la transmisión. A partir de ahí el software de las HoloLens mostrarán en las gafas al otro interlocutor, viendo con qué interactúa en ese entorno. No es la forma de comunicación más práctica por el momento, pero Microsoft lo venderá como el futuro de las videoconferencias.
Vía: The Verge.