Los rumores están apuntando a que AMD y Nvidia presentarán sus nuevas tarjetas gráficas en el Computex que se celebrará del 30 de mayo al 4 de junio. En el caso de AMD, se ha comentado alguna vez que este abril o en mayo como tarde llegarán las tarjetas gráficas para movilidad de AMD, por lo que la arquitectura Polaris podría ser desvelada en breve.
Aun así, quedan bastantes incógnitas sobre Polaris y Pascal, y va tocando hacer un repaso a lo que se sabe y no se sabe de ellas, de cara a las clásicas renovaciones veraniegas de equipos.
Qué llegará
AMD renovará su serie 400 prácticamente al completo, mientras que Nvidia probablemente presente la GTX 1070 y 1080 (o como se terminen llamando), y quizás la 1080 Ti ya que la recién presentada Tesla P100 usaría el mismo chip, y Nvidia ya lo tiene lista para vender la P100 en junio. En las últimas presentaciones de arquitectura son los primeros modelos en ser renovados, y con la GTX 950 muy reciente, y la GTX 960 de principios de 2015, son modelos que todavía necesitarán un tiempo para ser renovadas.
Todos estos modelos se esperan con memoria GDDR5, que no es mala opción puesto que el ancho de banda es solo una de las partes que determinan el rendimiento de una tarjeta gráfica. No hay que mirarlo con recelo o un "pues me espero a HBM2", porque por mucho ancho de banda que tengas, si no tiene suficiente potencia la tarjeta para ocuparlo totalmente, no sirve de nada. La memoria GDDR5X todavía no ha entrado en producción.
Cabe la posibilidad de que el chip GP104 (o como se llame) que usen las tarjetas de Nvidia lleguen con memoria HBM2, y que algún chip nuevo de AMD también use HBM, pero lo veo poco probable, aunque Nvidia usará previsiblemente HBM2 en la 1080 Ti porque usará el mismo chip GP100. En general, por arquitectura, las gráficas AMD siempre se han portado mejor a mayores resoluciones (1440p, 4K), y en ese caso el ancho de banda es más importante para no limitar la potencia de la tarjeta.
Arquitecturas
AMD lanzará sus tarjetas nuevas (al menos las que no sean un refrito) a un nivel de integración de 14 nm, mientras que Nvidia ha optado por los 16 nm de TSMC. Las ventajas son de consumo, pero teniendo en cuenta que AMD tiene mucho que mejorar en este espacio, Nvidia tendrá mayor margen para mejorar el rendimiento de sus tarjetas gráficas subiendo las frecuencias de los chips.
La arquitectura Polaris sufrirá diversas mejoras para sustentar la reducción de consumo, ya que el proceso de fabricación es solo una parte de la ecuación aunque sea la más importante. Será la cuarta generación de la arquitectura GCN (Graphics Core Next), y entre otras mejoras, incluirá nueva tecnología para compresión de memoria, un planificador para gestionar los recursos de la tarjeta, o una mejor gestión de la memoria. Poco más se sabe de Polaris.
Sobre Pascal, de momento se sabe que la arquitectura no cambia demasiado, pero lo suficiente para beneficiar la computación paralela. El chip GP100 (Pascal) mejora enormemente su capacidad de computación respecto al GM200 (Maxwell 2), y en parte también porque la reducción del proceso de fabricación mejora el TDP, y ello lleva a que Nvidia puede mejorar notablemente las frecuencias (en el GP100 pasan a 1480 MHz desde 1114 MHz) manteniendo el bajo consumo actual que tienen sus tarjetas.
Mejoras de rendimiento
Es pronto para decir qué mejoras de rendimiento traerán aparejadas, pero si además mantiene la capacidad de overclocking, Pascal puede suponer una mejora mayor que la que Polaris traiga al panorama de tarjetas gráficas. AMD se está centrando en disminuir el consumo de sus tarjetas, y espero que no se centre excesivamente en ello y perjudique la mejora de rendimiento.
Aun así, la ventaja en computación asíncrona (los sombreadores asíncronos de DirectX 12) de la arquitectura de AMD sigue dándole ventaja sobre la usada por Nvidia, a falta de ver cómo afectarán los cambios introducidos (bastante sustanciales en realidad) que deberían permitir recortar distancias. Veo probable que en la práctica, entre los cambios de Polaris y Pascal, al final queden todas las tarjetas de ambas compañías muy parejas en cuanto a rendimiento (para un mismo punto de precio). Pero todavía quedaría la parte de implementar los sombreadores asíncronos en los controladores de Nvidia.
Las tarjetas para portátiles
Debido a las mejoras de consumo y rendimiento, también veo altamente probable que Nvidia oferte las mismas tarjetas de sobremesa en formato MXM para portátiles o para mini-PC. Sería de manera análoga a lo ocurrido con la GTX 980, que redujeron su tamaño manteniendo el consumo de 165 W para poder meterla en una variedad de portátiles.
En el caso de Nvidia, cada vez hay menos razones para diferenciar la alineación de tarjetas gráficas de sobremesa y portátiles. Con el paso a un nodo de 16 nm, Nvidia puede usar los mismos chips en portátiles modificando ligeramente las frecuencias, o sin modificarlas en nada en realidad. Si el equivalente a la GTX 960 ve reducido su consumo un 20 a 30 % por el cambio de nodo, podría pasar a consumir entre 80 y 90 W.
Es precisamente el apartado de las tarjetas para portátiles de Nvidia el que está más en el aire. Quizás presente en el Computex las nuevas tarjetas gráficas para portátiles junto a las de sobremesa por el motivo que he dicho, o ante la falta de presión por parte de AMD estire la vida útil de la Serie 900M.
Un comentario final sobre la renovación
Bastantes estaréis (como yo) esperando a la renovación de tarjetas gráficas. Lo primero que debéis saber es que nada más lanzarse al mercado los nuevos modelos, los anteriores son descatalogados y dejan de ser ofertados por los distribuidores, y en algunos casos solicitan su devolución. Por tanto no esperéis a que presenten las nuevas tarjetas con la esperanza de comprar una GTX 970 o una R9 390 más barata, salvo que recurráis a eBay o sitios de segunda mano, donde quieran deshacerse del inventario que tengan de tarjetas antiguas.
Lo segundo es que el precio, como siempre, al principio del ciclo de vida de una tarjeta será más elevado y tocará esperar a que bajen un poco. Ahí ya dependerá también de la diferencia de potencia entre las nuevas tarjetas gráficas de AMD y Nvidia, porque si hay alguna favorita en potencia tardará más en bajar de precio.