La popular compañía de transporte privado lleva actuando en China desde hace ya un tiempo ya que no existía una regulación de este tipo de negocios en el país, actuando en un vacío legal. Pero según informa Bloomberg, el gobierno del país ha decidido tomar cartas en el asunto y crear una serie de normas para que dicho negocio pueda llevarse a cabo desde la legalidad.
A partir de ahora, los conductores de Uber que deseen operar en China deberán contar con una licencia que entregarán las autoridades locales donde se desarrollará el negocio; estos también necesitarán pasar una serie de test de cualificación y tendrán que tener como mínimo tres años de experiencia con el carné de conducir.
Respecto a la regulación en los vehículos, estos deberán contar con un GPS, alarmas y elementos de seguridad específicos. Los coches no podrán tener más de siete asientos y tendrán que ser retirados de este servicio una vez hayan alcanzado los 600.000 kilómetros. Respecto a la regulación para las compañías, toda la información acerca de clientes y conductores deberá almacenarse físicamente en el país durante al menos dos años.
De esta nueva regulación no solo Uber se beneficiará, si no también otras empresas similares como Didi Chuxing, la mayor compañía de transporte privado del país con mas de 300 millones de clientes y 14 millones de conductores, que por fin podrán dejar de actuar en las sombras.
Vía: Bloomberg.