El ataque que sufrieron varios servicios importantes el pasado 21 de octubre ha servido para recordar lo frágil que es actualmente el Internet de las cosas (IoT) y de lo que es capaz esa inmensa cantidad de dispositivos coordinados con un fin. El programa Mirai ha hecho que las compañías comiencen a tomarse en serio la seguridad de los dispositivos del Internet de las cosas, y en este aspecto, Cisco tiene mucho que decir.
Durante una serie de conferencias que ha dado la empresa, el vicepresidente y director del área de IoT de Cisco, Rowan Trollope, ha afirmado que es necesario cambiar el funcionamiento de la red de redes tal y como funciona en la actualidad para que pueda ser totalmente compatible con la infinidad de productos que están conectados a ellas y que crece día a día, sobre todo en cuanto a los dispositivos del Internet de las cosas.
Una compañía como Cisco, de la cual el propio Trollope ha afirmado que "domina la red", es capaz de liderar un cambio de tales dimensiones, comenzando por una certificación de seguridad para dispositivos de IoT. Esta permitiría, entre otras cosas, conocer los permisos y funciones que tiene y que va a realizar cada dispositivo, y así poder crear una lista de dispositivos seguros a los que se permitiría conectar a determinadas redes privadas.
