Nvidia está realizando en los últimos dos años una fuerte apuesta por los sistemas de conducción autónoma con tarjetas específicas como Drive PX. Son tarjetas que están orientadas a tener una alta potencia de cómputo, sobre todo de reconocimiento de imágenes, para identificar objetos y permitir la toma de decisiones a los vehículos autónomos de otras compañías.
Ahora el Departamento de Tráfico de California ha dado luz verde a Nvidia para probar sus vehículos en las carreteras públicas del estado. Aunque hay varias compañías de automóviles interesadas en el sistema de Nvidia y son socios en el desarrollo de Drive PX, de momento las pruebas de conducción autónoma las está realizando exclusivamente la propia compañía adaptando diversos vehículos, como es el caso del BB8.
Vía: Tech Crunch.