Análisis: MSI Aegis 3, un equipo compacto con un Core i7-7700 y GTX 1070 para RV

MSI continúa la senda de sus mini-PC y equipos compactos de sobremesa potentes actualizando uno de sus equipos de diseño más peculiar. El Aegis 3 llega con un diseño similar, y adaptado para la realidad virtual con un conector HDMI situado en la parte inferior del frontal del equipo.

Es un equipo que incluye una iluminación con ledes RGB personalizable, y que incluye uno de los nuevos procesadores Kaby Lake de Intel. Le acompaña también una GTX 1070 de la compañía, y en esta ocasión han revisado la refrigeración del equipo para que haga el mínimo ruido posible. Una buena actualización para todos los que quieran un mini-PC.

Diseño y hardware

El Aegis 3 cuenta con una estructura de acero y plástico, con un frontal en el que predomina el logo de la compañía. El aspecto del frontal es similar al de una rueda de tanque, lo que le da un buen aspecto en general, con amplios huecos con plástico transparente para que sea vea bien la iluminación con que cuenta. En los laterales se sitúan un par de antenas desplegables, más estéticas que funcionales, aunque se pueden usar para colgar los auriculares.

Para mantener el calor al mínimo, el equipo tiene ubicado en la parte inferior, y en un compartimento separado, una fuente de alimentación de 450 W con certificado 80 Plus Bronce. Es más que suficiente para un equipo cuyo consumo se va a situar en torno a los 230 W.

El diseño de la placa es personalizado, pero admite dos SSD de tipo M.2 compatibles con PCIe 3.0 x4 con NVMe. También hay espacio, un poco escondido, para dos discos duros de 3.5 pulgadas, y otros dos huecos para dos discos de 2.5 pulgadas. Aunque pequeño, no le faltan opciones de expansión al Aegis 3.

La CPU es un Core i7-7700, y la GPU una GTX 1070 Gaming de MSI. En la parte frontal cuenta con los dos conectores de 3.5 mm de audio, así como dos USB 3.0 y un USB 3.0 con conector USB tipo C. En la parte posterior, la placa mini-ITX personalizada de MSI tiene otros cuatro USB 3.0, dos USB 2.0, un Display Port y un HDMI, y la tarjeta gráfica dispone de tres DisplayPort y un HDMI. Existe la entrada para el enlace de RV que conecta la tarjeta gráfica con la conexión HDMI frontal.

El equipo se vende junto a un teclado Interceptor DS4200 y ratón Interceptor DS B1 de MSI. Son dos periféricos básicos para juegos, con el teclado contando con una retroiluminación RGB no personalizable. Los mecanismos utilizados son de domo de goma, aunque por el aspecto parezcan mecánicos, aunque al utilizarlos están a mitad de camino entre lo que aportan ambos tipos. Dan buena sensación de escritura, y son una curiosa elección para el teclado.

El ratón también dispone de tres botones adicionales y tiene varias zonas de iluminación con ledes rojos. Dispone de un sensor de hasta 4000 PPP, con un diseño ergonómico que se deja manejar bien, e incluye ocho pesos de 2 g que se introducen en una cavidad inferior.

Rendimiento

El procesador es uno de los nuevos Kaby Lake, un i7-7700, que viene a sustituir al Core i7-6700. Son prácticamente iguales, salvo que el 7700 funciona a 200 Mhz más, alcanzando velocidades de 3.6 GHz de base y 4.2 GHz de turbo. La arquitectura está ligeramente modificada, ya que por un lado acepta con cualquier chipset memoria de 2400 MHz, e internamente han mejorado el Speed Step 2, una tecnología de Intel que permite subir las frecuencias del procesador desde reposo sin incurrir en penalizaciones de consumo ni inestabilidades. Esto mejora la velocidad de respuesta del procesador en momentos puntuales.

El rendimiento de Core i7-7700 sigue siendo excelente, y para equipos como este es una buena elección ya que se trata de un chip de 65 W de TDP. Recurrir a un Core i7-7700K llevaría a necesitar mejor ventilación, lo que también llevaría a aumentar el ruido del equipo que, como se verá más adelante, es bajo.

GPU

El equipo incluye una GTX 1070 de MSI, que tiene las frecuencias ligeramente subidas a los 1519 MHz de base y 1709 MHz de turbo, con 8 GB de memoria GDDR5 a 8 GHz. Es un modelo de las Gaming X, por lo que el sistema de refrigeración con que cuenta es de los mejores del mercado.

Las pruebas en las gráficas de sobremesa están hechas con un equipo con un Core i7-6700K y 16 GB de DDR4-3000. Los ajustes de los juegos se ponen en ultra o el máximo posible, deseleccionando parámetros específicos de las arquitecturas AMD y Nvidia, como PureHair y HBAO+.

El rendimiento es similar al de otras GTX 1070 de sobremesa, aunque la diferencia de potencia con el i7-6700K y el uso de memoria de 2400 MHz en vez de 3000 MHz pueda afectar ligeramente a algunos juegos que sean intensivos de CPU.

Almacenamiento

MSI ha añadido un SSD de 256 GB de Kingston de tipo SATA 3 y un disco duro de 2 TB de 7200 RPM de Western Digital al equipo. Los resultados de velocidad de ambas unidades son buenos y en la línea de lo esperado, con 540 MB/s de lectura secuencial y 295 MB/s de escritura secuencial, así como 34 MB/s de lectura aleatoria de archivos de tamaño 4 KB y 120 MB/s de escritura. El disco duro está en lo más alto de lo que se suele conseguir en este tipo de almacenamiento, como casi 200 MB/s de lectura y escritura secuencial.

Temperaturas y ruido

Este tipo de equipos pequeños, con espacio limitado para refrigeración y con los componentes muy pegados, se beneficia de los procesadores y tarjetas gráficas de bajo consumo. En general no es un equipo que se caliente en exceso, lo que lleva a que el sistema de refrigeración es suficiente, aunque en reposo se sitúa el ruido en torno a los 32 dBA. Sobre un ruido ambiente de 30 dBA, esto significa que el oído más fino podrá escuchar un leve siseo procedente del equipo. En carga el ruido alcanzar los 38 dBA, que no es especialmente alto o molesto, aunque no sea totalmente silencioso. Pero tampoco se puede pedir que un equipo con esta potencia lo sea.

En reposo, la tarjeta gráfica se sitúa en los 34 ºC, y en carga puede llegar a los 73 ºC. Son valores típicos y dentro de lo normal para la GTX 1070. Por su parte, el procesador Core i7-7700 se sitúa en reposo en torno a los 40 ºC, y en carga llega a los 84 ºC, de acuerdo a los valores de las pruebas de estrés Furmark. En general el sistema de refrigeración es una grata mejora con respecto a otros equipos de MSI de 2015 y principios de 2016, como el Nightblade MI 2, que podía resultar un poco ruidoso.

Preparadas para la realidad virtual

Junto al equipo recibimos las gafas de realidad virtual Vive de HTC. Por características, el Aegis 3 tiene potencia más que suficiente para mover absolutamente cualquier juego y programa de realidad virtual, y lo hace de manera notable. La potencia del Core i7-7700 combinado con la GTX 1070 hace que este equipo tenga un rendimiento soberbio.

Con la necesidad de poner un nombre a todo, MSI ha llamado VR Link a la ubicación en el frontal del equipo de un conector HDMI para conectarle ahí las gafas de realidad virtual. Es una buena idea para un buen número de casos de uso, y además hay dos puertos USB donde conectarlas.

Conclusión

El diseño de los equipos como el Aegis 3 por parte de MSI está muy bien pensado. Tiene buenas opciones de ampliación, con capacidad para varias unidades de 2.5 y 3.5 pulgadas, con doble ranura para RAM, y una fuente de alimentación generosa para la combinación de Intel y Nvidia.

El equipo tiene un buen diseño, diferente y atractivo al mismo tiempo, que con el sistema de iluminación llamará poderosamente la atención a una mayor cantidad de potenciales compradores. Aunque no es tan fácilmente transportable como el Nightblade MI3, cuenta con una agarradera para transportarla, lo cual se agradece en este —no tan pequeño— tipo de PC.

El rendimiento del equipo es impresionante para cualquiera que quiera jugar a 1080p, pero también a 1440p, y en menor medida a 4K en títulos puntuales como algunos MMORPG o MOBA. No se puede pedir mucho más a un equipo de estas características, aunque el precio se sitúa en los 1900 euros. A su favor tengo que decir que incluye Windows 10, teclado y ratón, lo que supone un sobrecoste de en torno a los 200 euros, y que la caja y sistema de refrigeración son personalizados, además que el precio de RAM y SSD han subido en los últimos meses, y en el caso de la RAM se ha duplicado.

Si se hiciera el desglose por piezas, el precio del equipo por una caja personalizada, pequeña y con buena refrigeración no se va demasiado hacia arriba. Una vez que MSI ha corregido los problemas de ruido o calor excesivo en estos mini-PC que vende, no hay mucha razón para no recomendarlos como equipos para aquellos que busquen un PC preensamblado, que no todo el mundo tiene las ganas de montarse el suyo o comprarlo montado por piezas.