Una de las anécdotas, y bofetada en la cara, de la semana en el sector de la tecnología fue la decisión de Brian Krzanich, director general de Intel, de anunciar en el despacho oval de la Casa Blanca, junto a Trump, que invertirán 7000 M$ en terminar de construir la Fab 42. Es una instalación que se empezó a construir en 2011 y que no se terminó por motivos económicos.
La decisión llega como parte de las próximas medidas que tomará Trump para remozar el sistema de impuestos de los EE. UU., que en principio favorecería la creación de puestos de trabajo en el país por parte de las empresas tecnológicas. Intel ha indicado que creará 3000 puestos de trabajo de ingeniería de alta tecnología, y otros 10 000 puestos de trabajo directos e indirectos para el día a día de esta fundición en Chandler (Arizona).
Inicialmente la Fab 42 se iba a usar para crear líneas de producción de chips a 14 nm, pero finalmente será el proceso a 7 nm el que se produzca en ella. Podría utilizar un proceso de nanolitografía o utilizando luz ultravioleta extrema —longitudes de onda entre los 15 y 400 nm—, pero Intel no ha dado muchos más detalles de lo que ocurrirá dentro de las puertas de la instalación. Los chips producidos en esta fundición se destinarán a los PC, centros de datos y otros dispositivos como conducción autónoma o instrumental médico.
Vía: Anand Tech, Ars Technica.