AMD y GlobalFoundries mantienen una estrecha relación en el terreno de la producción de chips, siendo esta última la antigua división de fabricación de chips de AMD. En el último año, ambas compañías han llegado a acuerdos de producción, haciendo que GlobalFoundries se salte el nodo de fabricación a 10 nm para ir directamente al de 7 nm.
Los frutos de ello será que, según unas transparencias de una presentación de AMD del pasado febrero y proporcionadas por Videocardz, establecen que los procesadores a 7 nm de nombre en clave Starship de AMD llegarían a mediados de 2018. Serían el sucesor de los procesadores Naples para servidores, lo que llevarían la cuenta de núcleos por chip a 48 físicos o 96 lógicos.
Puesto que el salto es muy sustancial en cuanto al proceso de fabricación de 14 nm a 7 nm —indicativo del tamaño de cada transistor—, al mantener el tamaño de los chips permite incluir muchos más transistores para aumentar su potencia. En este caso, AMD apostaría por añadir más núcleos a estos procesadores empresariales.
Por otro lado, la versión de los Ryzen a 7 nm no llegaría hasta principios de 2019. Los productos realmente interesantes de todo esto son las APU de la compañía, que combinarán núcleos Zen con GPU integrada de tipo Vega. Estarán fabricadas a 14 nm y llegarán hacia finales de 2017.
Vía: Videocardz.